El béisbol se prepara para la definición entre Toronto Blue Jays y los Marineros de Seattle, rumbo a la Serie Mundial. Cuando la postemporada se extiende hasta el Juego 7, la tensión no es solo palpable; es el aire que se respira. Esta noche, una nueva página de la historia se escribirá, uniéndose a la selecta lista de duelos que han definido el destino de las Grandes Ligas.
El Juego 7 no es solo un partido; es una batalla a todo o nada donde no existen las mañanas. Es la cumbre de una serie de siete encuentros, un enfrentamiento que pone a prueba los nervios, el bullpen y la voluntad de dos equipos. Los managers dejan atrás la cautela y utilizan a sus ases de pitcheo sin reservas. El momento se vuelve más grande que cualquier estadística, y las leyendas nacen en un solo swing o un strikeout determinante.
La historia reciente nos recuerda por qué este formato es tan magnético. Las últimas ediciones han estado cargadas de drama y giros inesperados:
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2023 ALCS: Los Rangers derrotaron a los Astros, sellando su camino a la Serie Mundial.
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2023 NLCS: Los D-Backs vencieron a los Phillies, completando una sorpresiva carrera en el circuito de la Liga Nacional
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2020 ALCS: Los Rays se impusieron a los Astros en una serie marcada por la atípica burbuja de la pandemia.
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2020 NLCS: Los Dodgers superaron a los Braves en una serie de infarto.
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2019 Serie Mundial: Los Nationals lograron la hazaña al vencer a los Astros fuera de casa para capturar el título.
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2018 NLCS: Los Dodgers se coronaron sobre los Brewers para avanzar al Clásico de Otoño.
Al revisar estos encuentros, es evidente que el Juego 7 no distingue entre favoritos o underdogs. Los Astros han sido protagonistas en tres de las últimas seis instancias, demostrando tanto su fortaleza para llegar lejos como la dificultad de cerrar la serie final.
Esta noche, el drama regresa. Un equipo alzará el trofeo y celebrará el esfuerzo de toda una temporada, mientras que el otro verá su sueño desvanecerse en el noveno inning. Prepárense para el Juego 7, un evento que garantiza dejar una marca imborrable en la memoria de los aficionados.