Colombia se encuentra en medio de un brote de fiebre amarilla que ha cobrado la vida de 34 personas hasta la fecha, según el Ministerio de Salud. Este alarmante aumento en los casos ha llevado a las autoridades a implementar medidas drásticas para proteger tanto a los ciudadanos como a los viajeros.
Exigencia de carnet de vacunación
El ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, anunció que será obligatorio presentar el carnet de vacunación contra la fiebre amarilla para todos los viajeros que se desplacen hacia y desde las zonas de riesgo. Esta medida fue comunicada durante una transmisión del noticiero de RTVC y busca frenar la propagación del virus en áreas afectadas como Villarrica, Purificación y Prado, que ahora se han expandido a localidades como Dolores, Melgar y Girardot.
Estado de emergencia sanitaria
Ante la creciente preocupación por el brote, el presidente Gustavo Petro declaró un estado de emergencia sanitaria y económica el 15 de abril de 2025. En un comunicado oficial, Petro atribuyó el aumento de casos a la crisis climática, señalando que el cambio en las condiciones ambientales ha permitido que el mosquito transmisor se desplace a nuevas áreas, incluso a ciudades como Bogotá.
Datos preocupantes sobre la enfermedad
Hasta ahora, se han reportado 74 casos de fiebre amarilla en Colombia, con una tasa de mortalidad alarmante del 45.9%. El ministro Jaramillo confirmó que la emergencia sanitaria responde a un brote inusitado que comenzó en septiembre del año pasado en el departamento del Tolima.
Estrategias de vacunación y control
Para combatir esta crisis, el gobierno ha puesto a disposición 3.1 millones de dosis de vacunas contra la fiebre amarilla y está en espera de más suministros. Se han solicitado 2 millones adicionales a la OPS/OMS y 8 millones para cubrir al resto de la población en riesgo. La meta es vacunar a 14 millones de personas en áreas vulnerables.
Medidas adicionales implementadas
Además de la exigencia del carnet de vacunación, se han adoptado otras medidas preventivas, tales como:
• Vacunación masiva desde los 9 meses de edad.
• Control riguroso del vector mediante la eliminación de criaderos de mosquitos.
• Despliegue de equipos básicos de salud con más de 80.000 profesionales.
• Designación de hospitales de referencia para atender los casos.
• Alerta hospitalaria nacional, con posibilidad de aumentar el nivel de alerta.
• Restricciones de movilidad en zonas afectadas.
• Participación activa del Ejército y la Policía en las labores de control.
• Plan de contingencia y vigilancia intensificada para detectar y responder rápidamente a nuevos casos.
El brote de fiebre amarilla en Colombia representa un desafío significativo para la salud pública. Las nuevas medidas implementadas por el gobierno buscan mitigar el impacto del virus y proteger tanto a los habitantes como a los viajeros.