La ciudadanía por nacimiento para los hijos de inmigrantes indocumentados enfrenta un desafío significativo ante la Corte Suprema de EEUU. La administración del presidente Donald Trump ha solicitado bloquear este beneficio para ciertos extranjeros, lo que ha generado un intenso debate legal.
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A finales de septiembre, el Procurador General D. John Sauer presentó una petición para que la Corte Suprema revisara un fallo de la corte de apelaciones del noveno circuito. Esta corte había dictaminado en julio que la orden ejecutiva de Trump era inconstitucional, argumentando que violaba la decimocuarta enmienda de la constitución.
La corte de apelaciones se basó en una decisión previa de la Corte Suprema que limitaba las decisiones de tribunales a sus respectivas jurisdicciones. En este caso, el Noveno Circuito determinó que una orden judicial de alcance nacional era necesaria para proporcionar un alivio completo a los estados demandantes.
La orden ejecutiva y sus implicaciones
La orden ejecutiva firmada por Trump el 19 de febrero pretendía bloquear el derecho a la ciudadanía estadounidense para los hijos de inmigrantes indocumentados y aquellos extranjeros con visas temporales, como turistas y estudiantes. Esto provocó múltiples demandas en todo el país, tanto por parte de estados gobernados por demócratas como de organizaciones defensoras de los derechos civiles.
En junio, la Corte Suprema respondió a una solicitud “de emergencia” presentada por la administración Trump, pero no abordó el fondo del asunto: la constitucionalidad de bloquear la ciudadanía por nacimiento. En su nueva petición, el gobierno también cuestiona la decisión del juez Joseph Laplante en New Hampshire, quien había bloqueado la orden tras recibir demandas de personas afectadas directamente.
El procurador Sauer no solicitó una petición de emergencia esta vez, lo que significa que ahora corresponde a los jueces del Máximo Tribunal decidir si aceptan el caso. Para que esto ocurra, se requieren al menos cuatro votos, y si se acepta, el debate podría llevarse a cabo en 2026.
El argumento central de Trump
El presidente Trump sostiene que las decisiones anteriores de la Corte Suprema se centraron en los hijos de esclavos y no en cualquier persona nacida en EEUU. Por lo tanto, busca que los jueces actuales sigan este argumento. En un mensaje en Truth Social, Trump afirmó: “El derecho a la ciudadanía estadounidense consagrado en la Enmienda 14 nunca tuvo nada que ver con los intrusos modernos, inmigrantes ilegales que infringen la ley al estar en nuestro país; tuvo todo que ver con otorgar la ciudadanía a antiguos esclavos”.
La decisión del juez y su confirmación
La decisión del juez Laplante, que fue cuestionada por la administración Trump, fue confirmada por la Corte de Apelaciones para el Primer Circuito. Este fallo complica aún más la situación legal que enfrenta el Máximo Tribunal. En el caso "New Hampshire Indonesian Community Support versus Donald J. Trump", los jueces de apelaciones respaldaron la determinación del juez Laplante tras una demanda presentada por diversas organizaciones, incluida la Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU).
Cody Wofsy, subdirector del Proyecto de Derechos de los Inmigrantes de la ACLU, declaró: “Este fallo es la última reprimenda a los esfuerzos flagrantemente inconstitucionales del presidente Trump para eliminar la ciudadanía por nacimiento. De hecho, ningún juez ha aceptado los argumentos erróneos de la administración”. El futuro de la ciudadanía por nacimiento para los hijos de inmigrantes indocumentados pende de un hilo mientras se espera la decisión de la Corte Suprema.