La reciente confrontación entre Elon Musk, CEO de Tesla, y el presidente Donald Trump ha desencadenado una reacción negativa en el mercado, afectando directamente las acciones de la compañía. La tensión se intensificó cuando Musk criticó abiertamente “la gran y hermosa ley de Trump”, lo que resultó en una caída significativa en el valor de las acciones de Tesla.
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Caída en las acciones de Tesla
Según informes de medios como CBS News, el precio de las acciones de Tesla experimentó una caída del 7.1% durante las primeras horas de la jornada del martes, con una disminución adicional del 4% a media mañana. Esta fluctuación refleja la creciente preocupación de los inversores ante la incertidumbre generada por la disputa entre Musk y Trump. En total, las acciones han perdido aproximadamente un 12% desde que Musk comenzó sus críticas al proyecto de ley a principios de junio.
La reacción del mercado ha sido de cautela, ya que los inversores están preocupados por la posibilidad de que el gobierno federal recorte subsidios clave o imponga nuevas restricciones a las empresas de Musk. Dan Ives, analista de Wedbush, comentó que existe inquietud sobre si la administración Trump adoptará una postura más restrictiva respecto al gasto público relacionado con Musk.
Críticas contundentes de Musk
El conflicto se intensificó cuando Musk calificó el proyecto de ley como perjudicial para el empleo en Estados Unidos. En un mensaje publicado en X (anteriormente Twitter), advirtió sobre las consecuencias devastadoras que tendría la legislación, afirmando que “destruirá millones de empleos” y causará un daño estratégico significativo al país. Además, Musk sugirió que si el proyecto de ley se aprueba, podría formar un nuevo partido político y apoyar primarias contra cualquier republicano que vote a favor de la legislación.
Respuesta de Trump
La respuesta de Trump no se hizo esperar. A través de Truth Social, sugirió que el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), que Musk dirigió hasta mayo, debería investigar los subsidios federales que recibe Tesla. Trump insinuó que sin estos subsidios, Musk tendría que “cerrar y regresar a Sudáfrica”. Este comentario aumentó aún más la presión sobre Tesla y otras empresas de Musk, como SpaceX y Starlink, que dependen en gran medida de políticas gubernamentales favorables.
La relación entre Musk y Trump, que alguna vez fue considerada un activo para Tesla, ahora se presenta como un riesgo considerable para la empresa. La incertidumbre política y regulatoria generada por esta disputa podría tener repercusiones significativas en el futuro de Tesla y su valoración en el mercado.