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Un avión utilizado para paracaidismo con 15 personas a bordo se estrelló este miércoles en el aeropuerto Cross Keys, en Williamstown, Nueva Jersey. La aeronave presentó fallas mecánicas poco después de despegar, lo que obligó al piloto a intentar un aterrizaje de emergencia sin éxito.
No obstante, a pesar del fuerte impacto, todos los ocupantes sobrevivieron, aunque varios sufrieron lesiones de diversa gravedad. El accidente ocurrió alrededor de las 5:30 pm, apenas cuatro minutos después del despegue, según la plataforma FlightAware.
Las autoridades locales han calificado la rápida respuesta de los equipos de emergencia como clave para evitar una tragedia mayor, ya que, de los 15 ocupantes, tres fueron trasladados a un centro de traumatología debido a heridas más serias, mientras que los otros 12 fueron atendidos en emergencias por lesiones menos graves. Algunos de los afectados quedaron empapados en combustible, aunque afortunadamente no se produjo un incendio posterior al impacto.
La Oficina de Gestión de Emergencias del condado Gloucester destacó que semanas antes del accidente se había realizado un simulacro de respuesta a incidentes con múltiples víctimas en ese mismo aeropuerto. Gracias a ese entrenamiento, los equipos de rescate pudieron actuar con rapidez y eficiencia.
El siniestro está siendo investigado por múltiples agencias, incluyendo la Administración Federal de Aviación (FAA), la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) y autoridades locales, aún no se ha confirmado qué provocó la falla del motor que llevó al accidente.
Los investigadores también buscan determinar si hubo problemas previos de mantenimiento en la aeronave o errores humanos. No se ha precisado la altitud alcanzada por el avión antes de la caída, pero todo indica que fue un vuelo de muy corta duración.