Un reciente estudio realizado en España ha revelado una alarmante conexión entre el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir y los problemas de insomnio. La investigación fue realizada por la Sociedad Española de Neurología (SEN) y la Sociedad Española del Sueño (SES).
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Esta investigación concluyó que el 83% de los jóvenes entre 18 y 34 años utilizan pantallas antes de acostarse. Esta práctica se correlaciona con una alta incidencia de trastornos del sueño. El estudio fue publicado en la revista Infosalus y según él, solo el 24% de los encuestados afirmó dormir lo suficiente.
Los resultados son alarmantes
La mayoría de los encuestados, que representa alrededor de 61%, reconoció restar horas de sueño debido a sus ocupaciones diarias. Además, el 33% mencionó dormir menos de 7 horas por noche. La Dra. Marta Rubio, líder de la investigación, advirtió sobre los efectos nocivos de la luz artificial emitida por las pantallas de los dispositivos electrónicos.
Esta luz inhibe la producción de melatonina, la hormona que regula el ciclo del sueño. Como consecuencia, las personas experimentan dificultades para conciliar el sueño y tienen una calidad de sueño más pobre. Además del uso de pantallas, hay otros hábitos que también influyen en la calidad del sueño de los jóvenes.
¿Qué hacer para mejorar la calidad del sueño?
El consumo de estimulantes como café, té y refrescos, así como el alcohol, son factores que pueden alterar el sueño. Ante este panorama, los expertos recomiendan establecer una rutina de sueño saludable.
Para comenzar, se recomienda evitar el uso de dispositivos electrónicos al menos una hora antes de dormir. Otra técnica es crear un ambiente tranquilo y oscuro en el dormitorio. Se aconseja también limitar el consumo de cafeína y alcohol, y practicar actividades relajantes antes de acostarse.