El exitoso monólogo “Sangre en el diván”, protagonizado por Héctor Manrique bajo la producción del Grupo Actoral 80, regresa luego de una década a la sala del Centro Cultural Chacao con sus dos últimas funciones del año, este sábado 11 y domingo 12 de octubre.
Desde las 5:00 pm el público tendrá acceso al recinto. Las entradas a partir de $5,00 pueden ser adquiridas en las taquillas del teatro, de Cinex y por la plataforma Liveritickets.
El Centro Cultural Chacao vuelve a recibir a esta pieza dirigida por Pedro Borgo y Héctor Manrique, basada en el “best-seller” del mismo nombre escrito porIbéyise Pacheco sobre el psiquiatra, ex rector de la UCV, ex candidato presidencial y ex psiquiatra de tres mandatarios nacionales: Edmundo Chirinos.
Este personaje fue condenado a la cárcel por la muerte de una joven que llegó a ser paciente y víctima en uno de los casos policiales más sonados y hasta la fecha comentados por la opinión pública.
Una obra para admirar
El montaje se centra en el capítulo “El Delirio”, donde Chirinos delira e intenta reconstruir la historia desde su perversa psiquis, relatando su vida y colocándose como protagonista de eventos trascendentales en los últimos 60 años del país.
En la mente de los venezolanos resultó sorprendente que este personaje exitoso, culto, realizado, famoso y rico, sometiera a sus pacientes por más de 30 años a terapias de sueño en las que las sedaba, desnudaba y abusaba de ellas; gozando de total impunidad y valiéndose de sus dotes de seductor excepcional y manipulador, cualidades que se ven en escena sobre este personaje y este sonado caso que sigue levantando serias preguntas acerca del comportamiento y evolución de la sociedad venezolana.
“Sangre en el diván” se ha convertido en unos de los espectáculos más aclamados por el público dentro y fuera del país, su actor y director Héctor Manrique señala que lo seguirá haciendo mientras que el público siga interesándose en el mismo.
“Este montaje le sigue hablando al espectador de una manera contundente sobre lo que es nuestra sociedad, sobre los monstruos que habitan en ella. Sigue siendo una obra paradójicamente divertida y llena de cinismo, mentiras, manipulación, todo eso que era Chirinos y de lo que somos víctima los venezolanos que somos especialistas en creerle todo a nuestros líderes o a personas con influencia en la sociedad, incluso a los tildados ‘influencers’, es un llamado de atención a que pensemos por nuestra propia cabeza”, expresó.