Los Rays de Tampa cambiaron de manos. La pasada semana, el grupo liderado por el promotor inmobiliario Patrick Zalupski, finalizó la compra del conjunto con sede en Florida por 1.700 millones de dólares.
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Poco después de asumir el equipo, los nuevos propietarios prometieron iniciar la búsqueda de un nuevo estadio permanente que se inaugure en 2029, a lo que agregaron que esperan mantenerse en el área de la Bahía de Tampa.
Un nuevo destino
Stu Sternberg, quien fue propietario de los Rays durante 18 años y llevaba mucho tiempo buscando un nuevo estadio para el equipo.
Por su parte, Zalupski y otros altos ejecutivos, declararon este martes en una conferencia de prensa, que se está buscando un terreno en la región que podría abarcar aproximadamente 40 hectáreas (100 acres) y albergar tiendas, bares, restaurantes y otros servicios, además de un estadio de béisbol.
Asimismo, Zalupski explicó que el estadio será abovedado con techo fijo. “Necesitamos un nuevo estadio. No creo que nadie lo discuta”, dijo. “Queremos construir un equipo campeón sostenible. Confiamos en que podemos triunfar en Tampa Bay”.
Los ejecutivos manifestaron existe un profundo descontento en la zona sobre dónde construirían los Rays su nueva sede, a lo que agregó que el deseo del grupo es mantener al equipo en Tampa. “Estamos considerando todas partes”, dijo Ken Babby, el nuevo director ejecutivo del equipo. “No queremos encasillarnos en un solo lugar o sitio”.
Se han considerado varios sitios en la zona, como el barrio de Ybor City, con su vibrante vida nocturna, los terrenos de un colegio comunitario de Tampa e incluso un antiguo hipódromo.
Mientras tanto, continúan las obras en el Tropicana Field, cuyo techo fue arrancado y sufrió importantes daños internos en octubre pasado durante el huracán Milton. Para finales de semana se instalará la mitad de los 24 paneles del techo del estadio.
Según su contrato de arrendamiento vigente con la ciudad de San Petersburgo, los Rays están obligados a jugar en el Trop durante tres temporadas más. Los alcaldes de Tampa y San Petersburgo asistieron a la conferencia de prensa.