La pelota invernal de Puerto Rico ha sufrido en los últimos años la ausencia de las estrellas boricuas que brillan en las Grandes Ligas. Jugadores como Carlos Correa, Francisco Lindor, Javier Báez, José Berríos e Iván Rodríguez, entre otros, no han participado en la Liga de Béisbol Profesional Roberto Clemente (LBPRC), lo que ha generado decepción entre los fanáticos locales.
NOTAS RELACIONADAS
¿Cuáles son las razones que impiden que estos peloteros se pongan el uniforme de sus equipos en la isla? Según algunos de ellos, se trata de una combinación de factores que van desde el descanso físico y mental, la negativa de las organizaciones de las Grandes Ligas, el riesgo de lesiones y la falta de incentivos económicos.
José Berríos, lanzador de los Azulejos de Toronto, explicó que jugar en la pelota invernal es un tema "complicado" y que entiende a los fanáticos, pero que también necesita tiempo libre para recuperarse de la larga temporada de las Grandes Ligas.
"Ustedes trabajan todo el año. Pero en su tiempo libre los van a poner a trabajar otra vez. ¿Qué van a decir? Que no", dijo Berríos, quien agregó que cuando estuvo en Ligas Menores intentó jugar con los Indios de Mayagüez, pero la organización de los Mellizos de Minnesota se lo impidió.
Otro factor que influye en la decisión de los peloteros es el listado de "fatiga extrema" que elabora la oficina del comisionado de las Grandes Ligas, basado en el exceso de turnos al bate o lanzamientos en la temporada regular. Los jugadores que aparecen en este listado no pueden jugar en las ligas invernales sin el permiso de sus equipos².
Además, muchos peloteros prefieren evitar el riesgo de sufrir una lesión que pueda afectar su carrera o su contrato en las Grandes Ligas. Este fue el caso de Edwin Díaz, cerrador de los Mets de Nueva York, quien se lesionó en el Clásico Mundial de Béisbol 2023 y se perdió toda la temporada regular de ese año. Díaz optó por hacer su proceso de rehabilitación fuera de Puerto Rico y no jugar con los Cangrejeros de Santurce.
“Decidí seguir trabajando en la temporada muerta. El equipo prefirió que me quedara en casa entrenando y preparándome. Entiendo que quien lo necesite debería de hacerlo. Si yo veo que no me hace falta, prefiero compartir con mi familia”, manifestó Díaz.
Yadier Molina, uno de los mejores receptores de todo el beisbol, vio acción por última vez en su país en la 2020-2021, en el ocaso de su carrera, con los Atenienses de Manatí, posteriormente reforzó a Criollos de Cagua, incluso participó en la Serie del Caribe de ese año.
“Creo que cada cual toma sus decisiones de acuerdo a lo que le conviene. Parte de la decisión también viene por la familia. No hay que culparlos. Quien quiera jugar, bienvenido sea. Quien no, también. No vamos a juzgar a nadie que no quiera jugar por diferentes decisiones. Acuña lleva la bendición a Venezuela de que puede jugar. Bien por ellos. No se puede juzgar al que no quiera y no pueda jugar aquí”, dijo “El Yadi”.