Desde la marcha de Karim Benzema en 2023, el Real Madrid se encuentra sumido en una preocupante crisis desde el punto penal. La ausencia de un lanzador fijo y confiable ha pasado factura a los blancos, que han visto cómo oportunidades claras se desvanecen desde los once metros.
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Esta temporada, la situación ha sido alarmante. Los "merengues ha fallado la impresionante cifra de siete penaltis, un número que refleja la falta de un especialista en la plantilla.
De estos, cuatro fueron en La Liga EA Sports, dos en la UEFA Champions League y uno en el reciente debut en el Mundial de Clubes, fallado por Fede Valverde ante Al-Hilal en el tiempo de descuento.
¿Quién tomará la responsabilidad?
La búsqueda de un cobrador ideal ha llevado a una rotación constante y poco exitosa. Jugadores como Valverde, Luka Modric, Jude Bellingham, Vinícius Jr., Rodrygo y Kylian Mbappé han asumido la responsabilidad, pero hasta el momento, ninguno ha logrado consolidarse como el lanzador principal.
Esta incertidumbre genera una presión adicional en cada ejecución, afectando la confianza de los propios jugadores y, por ende, el resultado final de los partidos. En temporadas anteriores los lanzadores fijos eran Benzema, Sergio Ramos y Cristiano Ronaldo.
La eficacia desde el punto penal es crucial en el fútbol moderno, donde los partidos a menudo se deciden por pequeños detalles. La falta de un especialista no solo resta goles directos, sino que también puede influir en la moral del equipo y en la percepción de fortaleza mental.
El Real Madrid, un club acostumbrado a la excelencia en todas las facetas del juego, se enfrenta a un desafío importante que debe resolver si quiere mantener sus aspiraciones en todas las competiciones para la próxima campaña.
