En la era digital actual, plataformas como TikTok han transformado la manera en que consumimos contenido, ofreciendo videos cortos y atractivos que capturan nuestra atención durante horas. Sin embargo, diversos estudios señalan que el uso excesivo de estas redes sociales puede tener efectos negativos en el cerebro de los usuarios.
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Impacto en la memoria y la concentración
La exposición constante a videos breves y cambiantes, característica de TikTok, puede afectar la memoria prospectiva, es decir, la capacidad de recordar realizar acciones planificadas en el futuro. Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Múnich encontró que el uso de TikTok degrada significativamente el rendimiento en tareas que requieren esta habilidad, en comparación con otras plataformas como Twitter o YouTube.
Además, la naturaleza fragmentada del contenido en TikTok puede disminuir nuestra capacidad de concentración. La psiquiatra Nora Volkow, directora del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas de EE. UU., explica que la tecnología y las redes sociales se aprovechan del sistema de recompensa del cerebro, liberando dopamina y generando adicciones que afectan la autorregulación y la toma de decisiones.
Efectos en la salud mental
El uso excesivo de redes sociales también está relacionado con problemas de salud mental. Un estudio de la Universidad Pompeu Fabra y la Universitat Oberta de Catalunya reveló que uno de cada cinco jóvenes españoles pasa más de dos horas diarias en TikTok, superando el tiempo recomendado para evitar riesgos cognitivos y emocionales. Este uso excesivo se asocia con baja autoestima, percepción negativa de la salud mental y aumento del estrés y de las ideas suicidas.
A diferencia del consumo rápido de contenido en redes sociales, la lectura de libros implica un procesamiento cognitivo más profundo. Durante la lectura, se activan áreas del cerebro como el córtex prefrontal y el hipocampo, responsables de funciones como la planificación, la reflexión y la memoria a largo plazo. Este proceso fortalece los circuitos neuronales asociados con la atención y la comprensión, mejorando nuestra capacidad de retención de información.