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La Embajada de Estados Unidos en México reiteró recientemente que las visas estadounidenses pueden ser canceladas en cualquier momento y sin previo aviso, incluso sin que exista una sentencia judicial. Este anuncio, que generó inquietud entre quienes poseen este documento, resalta que “una visa es un privilegio, no un derecho”, por lo que el permiso de entrada al país está sujeto a revisión constante.
De acuerdo con la información oficial, el gobierno estadounidense tiene autoridad para anular una visa cuando determina que el titular ya no cumple con los requisitos necesarios. Entre las causas más comunes se encuentran:
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Permanecer más tiempo del permitido en el país.
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Participar en actividades ilegales o representar un riesgo para la seguridad nacional.
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Tener vínculos con grupos terroristas o con delitos graves.
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Detectarse información que indique que mantener la visa no favorece los intereses de Estados Unidos.
El Departamento de Estado revisa de manera periódica y silenciosa las visas otorgadas, las evaluaciones se basan en leyes migratorias, políticas internas y el interés nacional. Aunque las cancelaciones no se hacen públicas por motivos de privacidad, las autoridades notifican directamente al afectado. En muchos casos, la decisión puede tomarse sin necesidad de una condena penal, bastando con la existencia de información suficiente.
Foto: Visa americana
La Embajada aclaró que los funcionarios no pueden cancelar una visa por prejuicios o motivos políticos o raciales, por lo que cada decisión debe fundamentarse en las normas migratorias y en hechos comprobables. Sin embargo, Estados Unidos sostiene que estas cancelaciones forman parte de su política de seguridad y que se aplican sin distinción de nacionalidad o estatus social.