Bank of America ha anunciado el cierre de varias sucursales en 16 estados de EEUU durante este mes de diciembre. Esta medida se enmarca en una estrategia para ajustarse a los nuevos hábitos de los consumidores, quienes prefieren realizar sus operaciones a través de plataformas digitales en lugar de acudir a oficinas físicas.
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La disminución en el número de sucursales bancarias responde a la creciente popularidad de la banca digital. Desde 2009, el número total de oficinas bancarias en el país ha caído de casi 100,000 a menos de 80,000. Bank of America sigue esta tendencia para optimizar costos y mejorar sus servicios en línea.
Estados afectados
El cierre de sucursales impactará a diversos estados, incluidos:
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Arizona: Phoenix.
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California: Los Ángeles y Atascadero.
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Florida: Winter Haven.
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Georgia: Atlanta y Lawrenceville.
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Nueva York: Nueva York.
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Texas: San Antonio.
Estos cierres también afectan a Connecticut, Illinois, Maryland, Misuri, Nuevo México, Nueva Jersey, Ohio, Carolina del Sur, Virginia y Washington.
El cierre de sucursales podría ser un desafío para los clientes que prefieren el servicio presencial, especialmente en áreas rurales o con acceso limitado a internet. No obstante, quienes se sientan cómodos con la banca digital podrán aprovechar las mejoras en seguridad y funcionalidad de las plataformas del banco.
Al reducir su presencia física, Bank of America planea invertir más en tecnología y seguridad digital. Esto permitirá ofrecer servicios más rápidos y seguros, mejorando la experiencia de sus clientes y adaptándose a las necesidades del mercado moderno.
Alternativas para los usuarios
Los clientes que necesiten continuar con sus operaciones tienen varias opciones:
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Banca en línea a través de la página web del banco.
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Aplicación móvil para gestionar cuentas y realizar pagos.
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Cajeros automáticos para retiros y depósitos.
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Atención al cliente mediante líneas telefónicas.