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Nueva York se encuentra en alerta máxima ante la inminente llegada de una nueva tormenta de lluvia y nieve, acompañada de fuertes ráfagas de viento. La gobernadora Kathy Hochul ha declarado estado de emergencia en varias regiones del norte del estado, advirtiendo sobre posibles inundaciones.
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Las autoridades han desplegado un plan de contingencia para hacer frente a las condiciones climáticas extremas que se esperan este fin de semana. La combinación de nieve, viento y temperaturas bajo cero plantea un riesgo potencialmente mortal, especialmente en áreas cercanas a los lagos Erie y Ontario.
Hochul hizo un llamado a los neoyorquinos para que se mantengan informados sobre los pronósticos y tomen precauciones ante la llegada de esta nueva tormenta invernal. El estado de emergencia se ha declarado en varios condados del norte, y se insta a la población a seguir las recomendaciones de seguridad.
Se espera un descenso drástico de las temperaturas, creando condiciones ideales para la formación de nieve resbaladiza. Además, existe el potencial real de cortes de energía debido a las fuertes ráfagas de viento que podrían alcanzar hasta 70 mph en algunas áreas.
El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido alertas por fuertes vientos en el oeste de Nueva York y áreas al este del lago Ontario. Asimismo, se pronostican inundaciones repentinas en ciertas zonas, con un riesgo moderado de inundaciones costeras en la ciudad de Nueva York y Long Island.
Ante este escenario, se aconseja a los neoyorquinos tomar medidas preventivas, como utilizar sal para derretir el hielo, preparar sus hogares para el invierno y tener suministros de emergencia. Se insta a evitar viajes innecesarios y, en caso de ser necesario, asegurarse de que los vehículos estén equipados con todo lo necesario para enfrentar condiciones climáticas adversas.
La seguridad es la prioridad en Nueva York mientras se enfrenta a esta amenaza invernal, y se exhorta a la población a seguir las indicaciones de las autoridades y mantenerse alerta ante cualquier cambio en la situación meteorológica.