Rafael Nadal experimentó una dura derrota en el torneo de Brisbane, marcando su regreso a la competición después de casi un año de ausencia debido a una lesión. Tras el encuentro, el tenista español expresó su agradecimiento por el apoyo recibido en la ciudad australiana y compartió detalles sobre su estado físico, que genera incertidumbre sobre su participación en el Abierto de Australia, el primer Grand Slam del año.
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En sus declaraciones a través de Instagram, Nadal elogió a su oponente, Jordan Thompson, por su destacado rendimiento y le concedió todo el mérito por la victoria. Reconoció que no se sintió tan bien como en los dos partidos anteriores y lamentó no haber tenido la capacidad con la bola como en otras ocasiones, a pesar de estar en una buena posición para ganar el partido.
El tenista español describió su situación como parte del proceso por el que está atravesando y mencionó una pequeña sensación, no positiva, en un área similar a donde se sometió a cirugía anteriormente. Sin embargo, Nadal indicó que es demasiado pronto para hacer afirmaciones definitivas sobre su condición física y expresó la esperanza de que sea solo un músculo cargado. Se comprometió a someterse a más pruebas en los próximos días para obtener un diagnóstico más preciso.
“Yo no he estado tan bien como en los otros dos partidos, no tuve la capacidad con la bola como otras veces, pero aún así estaba en una buena posición para ganar el partido. Todo esto es parte del proceso por el que estoy pasando”, publicó Nadal.
La incertidumbre en torno a la salud de Rafael Nadal plantea dudas sobre su participación en el Abierto de Australia, lo que podría afectar sus planes para el primer Grand Slam del año. El tenista está a la espera de los resultados de las pruebas médicas adicionales para determinar la naturaleza exacta de su dolencia y evaluar su capacidad de competir en futuros eventos.