La declaración de Frenkie de Jong, expresando su frustración con el arbitraje en el partido del FC Barcelona contra el Rayo Vallecano, ha generado un gran revuelo. Las palabras, que denotan una crítica contundente y sin filtros, plantean serias dudas sobre la credibilidad y el profesionalismo del arbitraje en LaLiga.
NOTAS RELACIONADAS
Es evidente que las palabras del futbolista reflejan la frustración de un equipo y un jugador que sienten que las decisiones arbitrales afectaron el resultado del partido. En la zona mixta, expresó: "El árbitro nos iba avisando. No había VAR, luego solo fueras de juegos, luego sí, luego no... es una put***, no es una liga seria".
Cuestionamiento a LaLiga
La parte más explosiva de la declaración es, sin duda, la afirmación: "no es una liga seria". Esta es una crítica directa y profunda que va más allá de un simple error arbitral. Pone en tela de juicio la integridad de la competición en su conjunto.
Las declaraciones de un jugador de alto perfil tienen un impacto significativo, y cuando se cuestiona la seriedad de una de las ligas más importantes del mundo, se genera una ola de debate sobre la calidad de la organización.
La falta de claridad en el uso del VAR, como se describe en la frase, resalta un problema estructural. La tecnología, diseñada para corregir errores, parece ser una fuente de confusión en lugar de una solución.
Cabe destacar, que esta no es la primera vez que algún jugador, entrenador o directivo se quejan del arbitraje en LaLiga EA Sports. La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) debe tomar cartas en el asunto para revertir esta mala situación.