En un movimiento sin precedentes, todos los grupos de opinión y oposición al presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, han solicitado su dimisión inmediata. Este domingo 5 de enero, plataformas como Sí al Futur y Som un Clam emitieron un comunicado donde exigen la renuncia de Laporta y su junta directiva, argumentando que la situación actual del club es insostenible.
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La oposición, que incluye diez grupos y asociaciones vinculadas al Barça, ha manifestado su descontento tras varios incidentes recientes, como el mal manejo de las inscripciones de los jugadores Dani Olmo y Pau Víctor, y la fallida contratación de Heurtel. En su comunicado, instan a Laporta a reflexionar sobre su lema electoral de 2021, "Estimem el Barça", y a dar un paso al lado para permitir la llegada de nuevas ideas y una gestión más dinámica.
Exigencias Claras
El comunicado establece tres puntos fundamentales.
- En primer lugar, la dimisión inmediata de Laporta y su junta.
- En segundo lugar, si no acceden a dimitir, la oposición propone que se sometan a una cuestión de confianza vinculante, una medida que permitiría a los socios del club expresar su apoyo o rechazo a la actual dirección.
- En tercer lugar, si ninguna de estas opciones es considerada, la oposición no descarta activar una moción de censura, una herramienta que los socios pueden utilizar para exigir cambios en la directiva.
Los firmantes del comunicado, entre los que se encuentran organizaciones como Compromissaris FCB y Dignitat Blaugrana, expresan su frustración por la falta de acción de la junta directiva. A lo largo de los últimos años, han emitido múltiples comunicados en respuesta a la inacción y a la gestión deficiente del club, que ha llevado a una crisis social y económica evidente.
Llamado al Barçanismo
El mensaje final de la oposición es claro: es hora de demostrar un verdadero compromiso con el FC Barcelona. Apelan a la responsabilidad de la junta directiva, instándoles a priorizar el bienestar del club por encima de sus intereses personales. La situación actual requiere un cambio radical en la gestión, y la oposición está decidida a luchar por un Barça que refleje los valores y la pasión de sus socios.
La presión sobre Joan Laporta y su equipo es cada vez mayor. La comunidad barcelonista está en un punto crítico, y la respuesta de la junta directiva determinará el futuro inmediato del club. La oposición ha hablado, y ahora es el momento de que Laporta escuche.