Cada vez son menos las palabras que nos quedan para describir la apoteósica temporada de Grandes Ligas que está teniendo Ronald Acuña Jr. Y es que ese nivel individual demostrado hasta los momentos sin duda que es el impulso que necesitan los Bravos de Atlanta para pelear por la Serie Mundial.
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Durante la jornada de este martes, el de La Sabana ha tenido otra noche estupenda en todos los sentidos. Su capacidad para batear, fildear y robarse las bases no hacen más que encaminarlo hacia un posible premio MVP de la Liga Nacional.
En el segundo de la serie contra los Filis de Filadelfia, Acuña Jr. volvió a sacarla de jonrón y, además, estafarse una almohadilla. De hecho, ya son 12 juegos en la presente zafra en las que logra tales hazañas.
Dicha cifra lo iguala con Bobby Bonds, que en 1973 también alcanzo 12 compromisos con al menos un jonrón y una base robada. El mejor registro en ese sentido le pertenece a Rickey Henderson, quien logró 13 en la campaña de 1986.
Cabe señalar que es la tercera ocasión en el mes de septiembre que el criollo lo consigue. En junio logró su mejor marca con cuatro juegos, tanto en agosto como en julio sumó dos, mientras que en mayo solo tuvo un encuentro de ese estilo.