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Eduardo Rodríguez se subió al montículo del Chase Field por última vez en esta temporada regular de las Grandes Ligas. Su objetivo no era otro que guiar a los D-backs de Arizona a un triunfo vital sobre los Padres de San Diego, algo que logró cumplir a medias.
Y es que en 4.2 entradas de labor mantuvo a raya al conjunto rival, tolerando cuatro imparables, sin anotaciones, con dos bases por bolas y tres ponches. El detalle es que a lo largo de esa gran actuación, sus compañeros de equipo no lograron conectar ni un hit, ya que rompieron el no hitter en la baja del sexto.
Primera blanqueada con Arizona
Durante el compromiso, Eduardo Rodríguez no sufrió tantos contratiempos y pudo cumplir con el plan de preservar el cero. Mientras que en la primera entrada solo Donovan Solano se embasó, por medio de un sencillo; para la segunda el venezolano David Peralta hizo lo propio con un boleto.
Luego, para el tercer inning Solano descifró nuevamente a E-Rod y le disparó otro hit. Ya en la altura del cuarto, Xander Bogaerts lo madrugó con un imparable que de poco sirvió, ya que pudo sacar los siguientes tres outs sin problemas.
En la quinta entrada liquidó a los dos primeros bateadores, aunque después Jurickson Profar le sacó otro boleto, en tanto que Solano no lo perdonó con otro indiscutible. Ante dicho escenario, y con la necesidad de ganar el juego, el manager Torey Lovullo optó por reemplazar al venezolano con Kevin Ginkel. Al final, los Padres de San Diego triunfaron con pizarra de 5 a 0.
De esa manera, Eduardo Rodríguez finalizó su temporada regular con Arizona sin decisión. Su marca quedó en tres victorias y cuatro derrotas en 10 presentaciones, con 5.04 de efectividad, 1.50 de WHIP, 29 carreras permitidas, 19 boletos y 47 abanicados en 50 entradas lanzadas.