Luego de una larga espera, comienzan las Eliminatorias al Mundial 2026, y el caprichoso calendario nos condujo a tener que debutar ante Colombia, sí, Colombia. Nuestro gran rival.
Cada vez que nos enfrentamos al país vecino, siempre vuelve a ponerse el tema en sobre la mesa: “Es un clásico?”.
No hay una respuesta concreta para tal interrogante, siempre arrojará una contestación subjetiva, dependiendo la óptica desde dónde se vea, por lo que es difícil ponerse de acuerdo.
Desde Colombia, quizás, con un toque de arrogancia y menosprecio, no se acepta a “La Vinotinto” como el clásico rival, principalmente por esa sensación de superioridad que no permite ver como principal rival a una selección “inferior”, tomando en cuanta los logros alcanzados por una y otra, y es por esto que prefieren buscar ese pique con otro equipo.
Sin embargo, hay factores de todas las índoles, geográficos, históricos, sociales, políticos y también deportivos que nos colocan en el primer lugar de la lista como la principal rivalidad. Y son argumentos que no se pueden aplicar con otros países, porque son muchos los motivos que unen, y también los que desunen a estas dos naciones, y eso no se puede tapar con un dedo.
A pesar de las innumerables cosas en común que tenemos, en el fútbol, Colombia ha sabido sacarnos ventaja, tanto a nivel de clubes como selecciones. Y pensar que iniciamos este camino en las mismas condiciones.
La escuadra “cafetera” ha participado en seis mundiales de fútbol, incluso, llegando a Cuartos de Final en 2014 y han sido campeones de Copa América, algo que ya nosotros soñaríamos con tener, o al menos aproximarnos. Eso sin contar los logros a nivel de clubes.
No obstante, al entrar en el terreno de juego para enfrentarse, todo eso queda de lado, incluso, Venezuela aporta un “plus” que nos ha permitido cosechar buenos resultados últimamente ante ellos, y aunque se nieguen en aceptarlo, los colombianos también se esfuerzan al máximo.
Llamarlo “Clásico”, o no, queda por cuenta de cada quien, pero es una realidad que hay argumentos para considerarlo como tal, desde lo más obvio como la cercanía geográfica. Y tampoco se podrá negar que es un partido que nadie quiere perder, más aún con puntos en juego y en un arranque de Eliminatoria.