Cristiano Ronaldo ha tenido muchos momentos estelares en los que se ha llevado todos los reflectores, sin embargo, esta vez sumó uno bastante peculiar a su lista porque pidió al árbitro del compromiso que anulara una jugada que pudo beneficiarlo a él y su equipo, Al-Nassr.
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La acción del portugués, que será una de las imágenes del año sobre el juego limpio, se dio tan solo iniciar el compromiso, en el minuto 1', contra el Persépolis, en medio del encuentro por la quinta fecha de la fase de grupos de la Champions Asiática. Cristiano protagonizó una jugada en el área, que el árbitro señaló como penal, después de que aparentemente recibiera un cruce por el defensor.
El delantero se levantó rápidamente para indicarle al colegiado que no había sido falta y que revirtiera la decisión, algo que tiempo después el juez principal cumplió y evitó así la pena máxima para el Al-Nassr, que pudo abrir la lata en el marcador contra el equipo iraní.
El compromiso marcha con un empate parcial a cero goles por lado y está por reanudar la segunda parte. En esta competición el delantero luso registra 3 goles en 5 partidos y marcha viento en popa en el grupo E del torneo, liderando el pelotón con 13 puntos, seguidos de su rival hoy: el Persépolis.