El Real Madrid está ganando parcialmente 0-2 su duelo en la Champions League ante el Kairat Almaty, por la segunda jornada de la fase de la liga del torneo europeo. Sin embargo, en este duelo los merengues no han mostrado la mejor de las versiones contra un equipo con evidentes deficiencias.
Justamente, los merengues evitaron pasar un mal rato en el cotejo, después que el árbitro principal Marco Guida anulara su decisión inicial sobre la sentencia de un penal cometido al jugador local, Gromyko.
El colegiado se acercó a la pantalla de VAR para revisar la secuencia de la jugada, que en principio interpretó como penal cometido por Ceballos. Tras la revisión, el juez entendió que el jugador de Kaitat forzó el contacto y no fue un toque premeditado por el jugador merengue.
La revisión permitió al Real Madrid respirar en un partido que se le pudo complicar de cara al último tramo del compromiso, con un hipotético 1-2.