Luis Arráez dio sus inmpresiones, luego de conseguir el primer bateo para la escalera en la historia de los Marlins de Miami. El toletero venezolano se fue con noche perfecta con el madero para alcanzar un hito que ningún jugador de los peces había podido obtener en los 30 años de historia de la franquicia de Florida.
Sobre el turno del hit final: "Solo quería conectar el hit para completar el ciclo, ya lo sabía cuándo estaba en el turno. Tengo la pelota y se va a mi casa"
Una dedicatoria especial: "Mi mamá, mi esposa, mi coach de bateo junto a Nelson Cruz".
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La clave para el buen inicio de temporada: "Me siento sano, si estoy saludable puedo hacer muhcas cosas. Debo seguir mi rutina y jugar todos los días. Vine a jugar aquí y hacer que gane mi equipo.
¿Como evita los ponches?: "Cuándo era niño, solía darme ganas de llorar cuándo me ponchaba y por eso trato de no hacerlo. Ahora ya después de tantos años, solo me molesta. Ahora trato de jugar y ayudar. Jugar fuerte y en todas las facetas, solo tenemos que seguir así".