La selección nacional de baloncesto de Venezuela, ha iniciado con el pie izquierdo su travesía clasificatoria hacia el Mundial FIBA 2027. En un duelo cargado de dramatismo y rivalidad regional, el combinado venezolano sucumbió ante su similar de Colombia por un ajustado marcador de 80-78 en el primer encuentro.
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Esta dolorosa derrota, aunque por un estrecho margen, obliga al equipo a una reflexión profunda y una acción correctiva inmediata para no comprometer sus aspiraciones desde el inicio.
El encuentro, celebrado este jueves, estuvo a la altura de las expectativas, ofreciendo un espectáculo de alta intensidad que mantuvo a los aficionados al borde de sus asientos hasta el bocinazo final.
Desde el pitazo inicial, se evidenció que la localía jugaría un papel crucial, impulsando a una selección colombiana que mostró una mejor gestión de la presión en los minutos finales. A pesar de un esfuerzo encomiable en la recta final para remontar una desventaja que se había cimentado durante los cuartos intermedios, el conjunto venezolano no logró concretar la gesta.
Desarrollo del Juego: La Batalla en la Cancha
El partido se desarrolló en un constante intercambio de canastas, caracterizado por la paridad. Venezuela buscó establecer su identidad de juego a través de una defensa férrea y transiciones rápidas.
No obstante, la efectividad ofensiva no acompañó al equipo en momentos cruciales, especialmente desde la línea de tres puntos. La selección colombiana, por su parte, capitalizó los errores no forzados de Venezuela y encontró vías de anotación consistentes, apoyándose en una ejecución precisa de sus jugadas de pizarrón y una notable agresividad bajo los tableros.
La diferencia de dos puntos al final del encuentro subraya la naturaleza competitiva del baloncesto suramericano, pero también expone la necesidad de mayor concentración y precisión por parte de la Vinotinto. El equipo venezolano se encontró con dificultades para contener el impulso ofensivo cafetero durante el tercer cuarto, un período que resultó ser decisivo al crear la mínima brecha que, a la postre, resultó inalcanzable.
A pesar de las contribuciones individuales de figuras clave, como Windi Graterol, el esfuerzo colectivo no fue suficiente para inclinar la balanza. Los venezolanos lograron encadenar una racha de puntos en los últimos cinco minutos, demostrando su resiliencia y carácter, pero una combinación de tiros libres fallados y una defensa colombiana disciplinada en el último minuto impidieron la remontada.
La Tabla y la Obligación de Ajustar
Este resultado tiene implicaciones directas en la tabla de clasificación del Grupo C. Tras el primer duelo, la selección venezolana se ubica en el tercer puesto con tan solo 1 punto, producto de la derrota.
El panorama se completa con el triunfo de Brasil, que también logró sumar 2 puntos tras vencer a Chile en su respectivo encuentro de la jornada. De esta manera, Colombia y Brasil lideran provisionalmente el grupo, ambos con 2 puntos, dejando a Venezuela y Chile en la parte baja con una unidad cada uno.
Esta configuración inicial del Grupo C enciende las alarmas en el seno de la selección. El formato clasificatorio no ofrece mucho margen para la especulación, y ubicarse en el tercer escalón después de la primera jornada obliga a la selección nacional a un cambio de chip inmediato. La urgencia de sumar victorias se ha vuelto una prioridad ineludible.
