Uno de los futbolistas más criticados del Real Madrid en el análisis general de la temporada actual es Rodrygo Goes. El brasilero no ha tenido mucho impacto en el ritmo competitivo del equipo blanco, con actuaciones que no son aceptables en comparación con el nivel deseado por uno de los titulares habituales. Por lo tanto, su continuidad está ahora bajo escrutinio.
NOTAS RELACIONADAS
Aunque el delantero tiene contrato hasta el verano de 2029, el Real Madrid podría tomar una decisión inesperada y escuchar ofertas por él este mismo verano. La directiva, liderada por Florentino Pérez, tendría dos razones importantes para incluir a Rodrygo en el mercado de verano de 2025. La primera es su discreto y discutido rendimiento en el campo.
Esa dinámica negativa que ha marcado significativamente la temporada 24/25 de Rodrygo Goes tiene como gran ejemplo su participación en la final de la Copa del Rey. Su actuación en el partido en La Cartuja, a pesar de volver a un 4-4-2 que le favorecía, fue poco más que olvidable. El atacante no ha podido asentarse de nuevo en el once inicial, ofreciendo un rendimiento irregular, indigno de su nivel habitual, desde la llegada de Kylian Mbappé.
Rodrygo Goes habría quedado relegado a un segundo plano en todos los sentidos, pero lo que más preocupa al club es el aspecto táctico. Por ello, el futbolista brasileño está cobrando impulso poco a poco para salir del vestuario del Santiago Bernabéu.
Dilema sin resolver
La segunda razón por la que el Real Madrid podría optar por vender a Rodrygo durante el mercado de fichajes de este verano es económica. Según información publicada por el diario As, el futbolista está valorado en 100 millones de euros, una cifra que se sumaría a su extenso contrato firmado con el club blanco. Combinando ambos requisitos, el conjunto merengue podría obtener una suma considerable por su traspaso.
Con el dinero obtenido por la salida de Rodrygo, el Real Madrid podría avanzar en su agenda de fichajes, especialmente para completar una línea defensiva mermada que necesita refuerzos urgentes en todas las posiciones. Además, liberaría una masa salarial significativa, lo que repercutiría en los beneficios de la próxima temporada.