El beisbol volvió a sonreír con la presencia de Ronald Acuña Jr. en el terreno. Tras 362 días alejado de la acción por una lesión que lo obligó a someterse a cirugía y a un largo proceso de rehabilitación, el jardinero venezolano regresó a la alineación titular de los Bravos de Atlanta y no pudo tener un retorno más espectacular.
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Aplausos, pancartas y una ovación inolvidable en Atlanta
La afición de los Bravos se volcó por completo para recibir al ídolo. Desde temprano, los alrededores del Truist Park se tiñeron con camisetas, gorras y pancartas que llevaban el nombre de Acuña. Y una vez anunciado en la alineación como primer bate y jardinero derecho, el estadio explotó en aplausos. La ovación fue unánime, conmovedora, y no pocos fanáticos dejaron escapar lágrimas al ver al MVP de la Liga Nacional 2023 regresar a su casa.
La emoción no se detuvo ahí. Apenas se escuchó la voz del umpire cantar "play ball", todas las miradas se centraron en el número 13, que caminó decidido al plato. Y en el primer lanzamiento que vio, sin siquiera dudarlo, Ronald descargó todo su poder.
Un jonrón demoledor para anunciar su regreso
El primer pitcheo de Nick Pivetta Acuña no lo desaprovechó y con su característico swing agresivo pero controlado, impactó la bola con violencia. El batazo de poder superó la verja sin dificultad. Un cuadrangular que no solo abrió el marcador del juego, sino que también funcionó como una declaración de intenciones: Ronald está de vuelta, sano, y con hambre de seguir dejando huella en las Grandes Ligas.
Sus compañeros lo recibieron en el dugout con abrazos, risas y palmadas. La emoción era palpable. La energía que desató en el estadio fue tan intensa que hasta el propio pitcher rival solo atinó a mirar incrédulo cómo la pelota se perdía entre las gradas.
Atlanta vuelve a soñar con su estrella
El jonrón de Acuña no fue solo una anécdota poderosa. Fue un mensaje. A los fanáticos, a sus compañeros, y a toda la MLB. Después de casi un año fuera de acción, el venezolano regresó con el mismo nivel explosivo que lo llevó a ganar el MVP. Su velocidad, su fuerza y su pasión siguen intactas.
Atlanta, que ha tenido una campaña irregular, recibe con los brazos abiertos a su principal referente ofensivo. Y si el primer turno fue una muestra de lo que está por venir, no cabe duda de que los Bravos tienen de nuevo a su arma más letal lista para llevarlos a lo más alto.
Ronald Acuña volvió, y lo hizo como solo las estrellas saben hacerlo: con espectáculo.