Caer en una mala racha es algo del todo normal en cualquier ámbito de la vida; al comienzo de esta temporada 2025 de Grandes Ligas, Eugenio Suárez se mostró excepcional durante sus cuatro primeros juegos con los D-backs de Arizona, sin embargo en lo sucesivo se adentró en un bache que se acentuó a lo largo de los recientes 15 partidos.
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En el primer lapso citado, el “Bolibomba” compiló línea ofensiva de .286 en promedio de bateo, .412 en porcentaje de embasado, 1.143 de slugging, 1.555 de OPS, con 4 imparables en 14 turnos, 4 cuadrangulares, 7 carreras remolcadas, 5 anotaciones, 2 bases por bolas y 3 ponches.
Pero en el segundo segmento al que nos referimos, su línea de producción dictó: .118/.224/.216/.440 porque se fue de 51-6 e incluyó 2 dobletes, 1 vuelacercas, 4 impulsadas, 2 pisadas del plato, con 5 pasaportes y 21 chocolates engullidos. Además, durante la jornada de este 23 de abril, la situación se hinchó un poco más debido a que falló en su primer turno del duelo ante los Rays de Tampa Bay.
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Para el tercera base nativo de Venezuela, la situación no ha sido ajena, incluso el año pasado igualmente tuvo un comienzo muy lento, accidentado con el madero que de paso, se extendió a lo largo de la primera parte del torneo.
Quizás se ha tratado de una coincidencia, pero en 2024 también comenzó muy bien en sus cuatro primeros partidos: .429/438/.643/.1080 como resultado de 14-6, 1 jonrón, 4 llevados a la registradora, 3 anotaciones, 1 boleto más 4 ponches.
En la primera parte en cuestión, Eugenio Alejandro arrojó .216/.302/.366/.668, así como 10 vuelabardas y 48 impulsadas, pero luego de una serie de ajustes en su mecánica de bateo, en el segundo segmento rebotó hasta .307/.341/.602/.942 más 20 tablazos de cuatro esquinas y 53 remolcadas.