De acuerdo a las autoridades estadounidenses, es posible que en esta temporada se produzcan menos incendios en Óregon. Sin embargo, las situaciones adversas que incluyen la falta de viviendas rurales, salarios bajos e inestables, forman parte de los desafíos a los que se enfrenta la fuerza trabajadora.
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Se trata del mensaje de los funcionarios estatales y federales durante este año. Estos discutieron los factores que afectan a los efectivos. La reunión se llevó a cabo en el Centro de Coordinación Interinstitucional del Noroeste. Este Centro se ubica en Portland, siendo una de las redes más amplias de prevención y respuesta de incendios forestales que contempla nueve agencias estatales y federales.
En general, destacaron que es necesario invertir mayor financiamiento en tecnología para la detección de por satélite, además, de aumento salariales y alternativas de viviendas más estables.
Por su parte, Jeff Fedrizzi, oficial estatal de manejo de incendios de la Oficina Federal de Administración de Tierras, precisó que muchos bomberos forestales viven en sus automóviles.
“Tenemos gente viviendo en la parte trasera de sus plataformas. Van a trabajar, apagan incendios y acampan durante dos semanas y luego regresan y acampan”, afirmaron los representantes a los senadores estadounidenses de Oregón Ron Wyden y Jeff Merkley y a la representante Suzanne Bonamici.
Habitualmente, la temporada de incendios se prolonga de mayo a octubre. No obstante, la temporada más intensa suele ser de julio a septiembre.
En ese momento, los funcionarios pueden apagar varios incendios de manera simultánea, lo que termina agotando los recursos rápidamente.
Ed Hiatt, subdirector de las operaciones regionales de Servicio Forestal de EE.UU., destacó que este año el componente tiene 80% de los bomberos que se ameritan en Óregon y Washington, mientras que el 20% de los puestos están disponibles.
Gracias a la Ley de Empleo e Inversión de Infraestructura, los bomberos han recibido aumentos salariales suplementarios de 20.000 dólares desde el año 2021. No obstante, las autoridades del Servicio Forestal manifestaron que deberían ser permanentes. Cabe destacar que el salario está autorizado hasta septiembre de este año y se espera que lo incrementen de manera significativa.