El lanzador venezolano de los Mellizos de Minnesota, Pablo López, se encuentra muy cerca de retornar a los terrenos de juego, tras completar su primera salida simulada en medio de su recuperación. “Estoy feliz de estar en el montículo”, expresó.
NOTAS RELACIONADAS
López no ha lanzado desde el 3 de junio, cuando salió del montículo en Sacramento con un dolor en el hombro derecho que luego fue diagnosticado como una distensión en el músculo redondo mayor derecho.
El cronograma original para su regreso era de ocho a 12 semanas; él sigue en camino para el estimado más conservador.
¿Qué dice López?
López dijo que indujo mucho contacto débil, lo que indica que sus lanzamientos se movían como él pretendía. “Cumplí con todos los objetivos, manteniendo la velocidad en la primera y segunda entrada (…) Los pitcheos se movían como se suponían que debían hacerlo”, explicó.
Asimismo, el serpentinero aseguró que se sintió muy bien con respecto a su mecánica, la ejecución y el atacar la zona. “Así que, creo que todo está bien. Quería marcar todas esas casillas (…) El objetivo de esta preparación es volver y conseguir una cantidad decente de aperturas”.
La importancia de que Pablo López luche por regresar este año en lugar de darse por vencido e irse a casa temprano se amplifica por la cantidad de caras jóvenes en el clubhouse y especialmente en el cuerpo de lanzadores, donde López es un líder en todo el sentido de la palabra. “Él entiende su presencia en este clubhouse y en la organización y lo que significa para todos aquí”, comentó el manager Rocco Baldelli.
Pablo López ahora entra en el ciclo habitual de cinco días para los lanzadores abridores, lo que significa que seguirá su rutina habitual entre salidas y debería volver al montículo en cinco días. Si se enfrentará de nuevo a sus compañeros de equipo, aún está por determinarse.