El joven lanzador Mick Abel tuvo un debut de ensueño en las Grandes Ligas con los Phillies de Philadelphia, dejando una marca en la historia de la franquicia. En un duelo de alto calibre contra Paul Skenes de los Piratas de Pittsburgh, Abel dominó desde el montículo y contribuyó a la barrida de su equipo en la serie de Rivalry Weekend.
NOTAS RELACIONADAS
Récords y dominio absoluto
Abel, el octavo mejor prospecto de la organización, lanzó seis entradas en blanco, permitiendo cinco hits, sin otorgar boletos y ponchando a nueve bateadores. Con esta actuación, igualó el récord de la franquicia de los Phillies para más ponches en un debut en las Grandes Ligas, marca establecida por Curt Simmons en 1947. Su dominio fue tal que se unió a un selecto grupo de lanzadores que han logrado nueve ponches sin conceder carreras ni bases por bolas en su estreno en los últimos 125 años.
Una lista élite
El desempeño de Abel lo coloca en una lista de élite junto a nombres como Stephen Strasburg, quien logró 14 ponches en su debut en 2010, y Bryce Miller, quien alcanzó 10 en 2023. Además, comparte la hazaña de nueve ponches sin carreras con figuras como Shota Imanaga, Nick Kingham y Sammy Stewart, consolidando su lugar en la historia reciente de la MLB.
La actuación de Mick Abel no solo ayudó a los Phillies a completar la barrida sobre los Piratas, sino que también dejó claro que el joven lanzador tiene el talento para convertirse en una pieza clave en la rotación del equipo.