Con 35 años, Kike Correa, hijo del emblemático animador Gilberto Correa y la exreina de belleza, Raquel Lares, demuestra que heredó el talento de sus padres en el mundo del espectáculo.
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La mañana del miércoles 19 de febrero, Kike tuvo un encuentro con los medios en el que habló acerca del lanzamiento de su nuevo programa con el que busca darle otro aire a la radio venezolana.
"El Último del Día" lleva por nombre el espacio que estrenó recientemente y el cual transmite de 5 de la tarde hasta las 7 de la noche en el Circuito Pop 105.9 FM, donde su principal objetivo es entretener a ese público caraqueño.
“Siento que el programa tiene mucho que ofrecer, que te acompaña demasiado en el día a día, de lunes a viernes, que es tan difícil, querer calmar todo tu día de oficina, de trabajo, de problemas en Caracas”, declaró el criollo que celebraba su cumpleaños número 35.
Asimismo, aseguró que están trabajando en darle más forma al programa, agregándole nuevos segmentos como: "El notiserio", "El Top 5" y "Cosas que no necesitabas saber", con los que buscan imprimirle más frescura al proyecto.
Entre tanto, el plan de Correa es movilizarse por la ciudad con la Móvil POP y realizar transmisiones en la calle, de esa manera espera acercarse mucho más a la gente, así como también subirle la calidad al espacio.
“Quiero llegar a la gente que me escucha y abordar no solo cosas de farándula sino también de bienestar, hacer un programa que realmente te nutra, que puedas escuchar en El último del día, que sea tu último pensamiento antes de llegar a casa”, añadió el galán que también se desarrolla como modelo.
La relación con su padre
Desde muy pequeño, Kike ha sido objetivo para los reflectores debido al peso de sus apellidos en el mundo del entretenimiento. En su nacimiento, acaparó los principales titulares que reportaban el nacimiento del primer varón del animador sensacional, con quien hoy por hoy mantiene cierta distancia.
“En cuanto a mi viejo, yo con él hablo muy poco porque realmente lo respeto como persona. Siento que tuvimos muchas oportunidades de hacer algo muy bonito desde chamos y cada vez se dio un poquito menos”, confesó.
“Lo honro demasiado. Lo que dije de 50% y 50%. Todos los problemas que tenemos como adultos parten de los padres y la única manera que yo he encontrado para sanar esos problemas es honrando, pensar que esa persona hizo lo mejor que pudo hacer en su vida para estar de cierta manera y no juzgar para nada”, señaló.