Stefano Malavé Macri. Twitter: @StefanoMalaveM
El 28 de octubre, se enfrentarán en Arabia Saudita el campeón unificado de peso pesado de boxeo Tyson Fury y el excampeón camerunés de peso pesado de artes marciales mixtas Francis Ngannou, siendo este un combate en el que se espera un espectáculo deportivo.
Esta no sería la primera vez que un peleador de UFC se mide ante un boxeador en el ring, ya que, en los últimos años, han figurado en la cartelera boxística combates como el de Floyd Mayweather contra Connor McGregor en 2016 y el de Jake Paul contra Anderson Silva en 2022.
Si bien esto es una estrategia que permite unificar al público de ambas disciplinas en un solo evento, los puristas del boxeo cuestionan esta práctica y la consideran perjudicial para el deporte. Uno de sus detractores es el promotor Eddie Hearn.
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"Le ofrecí esa pelea a Anthony Joshua, no estuvo interesado, pero sabía que existía la posibilidad de que peleara contra alguien. Creo que es terrible para el boxeo porque obviamente había una posibilidad de que sea diera una pelea por todos los títulos".
Estas declaraciones surgen a raíz de que, en un principio, el combate entre Ngannou y Fury iba a ser una pelea de campeonato. Sin embargo, el Consejo Mundial de Boxeo autorizó a este último de no defender su título y dejar esta pelea como "exhibición".
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En cuanto al posible resultado de la pelea, Hearn considera que, indudablemente, el ganador será Tyson Fury: "Podrías hacer esta pelea un millón de veces y él (Ngannou) nunca la ganaría. Estoy siendo serio, esa es la realidad".