Bárbara Chirino / @barbarachirino
Pese a su mala relación con su familia, el príncipe Harry dirá presente el próximo 6 de mayo en la coronación de su padre, el rey Carlos III, que será celebrada en la abadía inglesa de Westminster, ocho meses después del fallecimiento de la monarca Isabel II.
Lo que llamó la atención en lo comunicado por el Palacio de Buckingham, es que sólo asistirá el hijo menor de Carlos, pues su esposa Meghan Markle y sus hijos Archie y Lilibet se quedarán en su casa en California, Estados Unidos, donde han vivido por casi tres años.
“El Palacio de Buckingham se complace en confirmar que el Duque de Sussex asistirá al Servicio de Coronación en la Abadía de Westminster el 6 de mayo. La Duquesa de Sussex permanecerá en California con el Príncipe Archie y la Princesa Lilibet", suscriben en el comunicado.
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Esta noticia resulta sorpresiva para todo el público que ha estado atento a todos los problemas que han surgido desde que Harry publicó su libro donde le da hasta con el tobo a la realeza británica y deja bien claro su mala relación con el esposo de Camilla.
De igual forma, el príncipe aseguró que no ha habido ninguna voluntad de reconciliación entre él, su padre y su hermano mayor William, con quien también tiene ciertas diferencias, además, el esposo de Meghan aseveró que él quiere una familia “no una institución”.
En el mes de enero, el duque de Sussex fue cuestionado si iría o no a la coronación de su padre, a lo que respondió: “La pelota está de su lado. Hay mucho que discutir y realmente espero que estén dispuestos a sentarse y hablar”.
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