El acetaminofén es uno de los medicamentos más usados en el mundo para calmar el dolor y bajar la fiebre. Pertenece al grupo de los analgésicos y antipiréticos, lo que significa que es útil para tratar el dolor leve o moderado, así como la fiebre, en personas de todas las edades.
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Además, es considerado como uno de los medicamentos más seguro y se encuentra disponible en diferentes presentaciones. Sin embargo, no es una píldora mágica y tiene sus riesgos. Tomar más de la dosis recomendada puede causar efectos secundarios graves.
Algunos estudios sugieren que el uso habitual de este medicamento podría aumentar el riesgo de padecer problemas de salud como hipertensión, infarto o ictus, según informa el periódico británico The Sun.
Efectos secundarios
El acetaminofén tomado con cuidado y correctamente, puede ser seguro y eficaz. Pero tomar demasiado puede provocar una sobredosis y causar daños graves en su organismo.
Daño hepático y renal
De acuerdo con el diario The Sun, quien hace referencia al Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS, por sus siglas en inglés), tomar demasiado acetaminofén se asocia con daño hepático y renal.
Según el NHS el acetaminofén se metaboliza en el hígado y se elimina por los riñones, por lo que si se toma una cantidad excesiva, puede provocar daño a estos órganos.
Trastornos sanguíneos
El paracetamol o acetaminofén puede alterar la producción o la función de algunas células de la sangre, como las plaquetas o los glóbulos blancos. Su consumo en exceso puede causar trastornos sanguíneos como la trombocitopenia o la leucopenia.
Aumento de la presión arterial
De acuerdo con The Sun, quien hace referencia a un estudio de la Universidad de Edimburgo en 2022, el consumo en exceso de dicho medicamento pueden elevar la presión arterial y el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
El citado medio señala que el acetaminofén contiene sodio, compuesto que puede aumentar el riesgo a sufrir un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
Reacciones alérgicas
Según el NHS, el acetaminofén rara vez causa efectos secundarios si se toma en la dosis correcta. Pero en casos raros, algunas personas pueden sufrir una reacción alérgica grave llamada anafilaxia. Esta condición puede presentar síntomas como hinchazón de los labios, la boca, la garganta o la lengua, dificultad para respirar, cambios en el color de la piel, somnolencia, mareos, sarpullido o picazón.
El acetaminofén está presente en muchos productos
Cada año en los Estados Unidos, la gente se resfría mil millones de veces y hasta el 12% de las personas contrae la influenza. Además, siete de cada 10 personas utilizan medicamentos sin receta para tratar los síntomas del resfriado, la tos y la gripe.
El acetaminofén suele ser un ingrediente de muchos medicamentos utilizados para tratar estos síntomas. Se utiliza en muchos medicamentos recetados habitualmente en combinación con analgésicos como la codeína, la oxicodona y la hidrocodona. La dosis máxima recomendada actualmente de acetaminofén para los adultos es de 4,000 miligramos al día para todos los medicamentos que pueda estar tomando.
Para evitar sobrepasar esa dosis:
- Sea consciente del número de miligramos de acetaminofén que contienen todos los medicamentos que está tomando.
- No tome más de un medicamento de venta libre que contenga acetaminofén.
- No tome un medicamento con receta y otro de venta libre que contenga acetaminofén a menos que se lo recomiende su profesional de la salud.
- Cuando su profesional de la salud le recete un medicamento, pregúntele si contiene acetaminofén e infórmele de todos los demás medicamentos (con o sin receta) y suplementos que toma.
Cuando decida qué producto de venta libre comprar, lea la etiqueta de datos del medicamento para ver si entre sus ingredientes figura el acetaminofén, sobre todo antes de utilizar dos o más productos al mismo tiempo.