El sábado 5 de mayo de 1973, el deporte hípico vivió un episodio memorable. El primero de la Triple Corona de Estados Unidos, el Kentucky Derby (G1) contó con la presencia de trece potros de tres años y entre ellos se encontraba un purasangre que a la postre haría historia y de qué forma.
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Los favoritos en la pizarra eran Angel Light, Secretariat y Sham. En el punto de salida estuvieron y largaron en busca del premio de 155.050 dólares reservados para el ganador. La asistencia se calculó en 134.476 personas que ocuparon todas las tribunas y la parte interna de la pista. En ese entonces, la pista de grama no existía y allí entraron no menos de 65.000 asistentes.
Secretariat, montado por Ron Turcotte para la cuadra de Lucien Laurin y defendiendo los colores blancos y azules de la Señora Penny Chenery, salió en el medio del pelotón, pero a mitad de la curva final aceleró el paso y alcanzó a Sham, que punteaba con mucha fuerza. Secretariat con su físico pasó al primer lugar “aplastando” a Sham para llevarse la victoria.
Pero no solo fue el hecho de que este caballo conquistó el triunfo en la prueba hípica más importante del mundo, sino que lo hizo en menos de dos minutos. Secretariat ganó en 1:59.2 (119.2) para los 2.000 metros. Su escolta Sham marcó 1:59.4. Fue sin dudas, el Derby más rápido de la historia.
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Adicionalmente, Secretariat logró algo que ningún otro ejemplar ha hecho: cada cuarto de milla (400 metros) que recorría, lo hizo en menos tiempo. Este fenómeno equino pasó los primeros 400 metros de manera individual en 25.2, luego los segundos 400 en 24, el tercer cuarto de milla en 23.4, después en 23.2 y el último furlong (400 metros) en 23.
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El próximo reto de Secretariat sería el Preakness Stakes (G1) el sábado 19 de mayo. Allí hizo otra hazaña que después lo llevaría al épico Belmont Stakes (G1), donde se cubrió de gloria y pasó de ser un caballo de carreras a una leyenda del deporte en el planeta.