Bárbara Chirino / @barbarachirino
Este martes 22 de noviembre los cantantes colombianos Greeicy y Mike Bahía se presentaron en nuestro país específicamente en Caracas para ofrecer un show a su público como parte de su gira Amantes Tour-Kai, sin embargo, no todo fue color de rosa para todos los asistentes al CCCT.
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Lo bueno
Empecemos resaltando las cosas buenas de este show. Comencemos con que tuvieron éxito y lograron vender en su totalidad las entradas por lo que ya a las 6 de la tarde estaban Sold Out y tenían a muchas personas buscando entradas como palito en romero. La expectativa crecía y la gente ya sentía la emoción por ver a sus artistas favoritos.
La apertura del espectáculo estuvo cargada de una gran energía gracias a la cantante juvenil, Carmen De León que imprimió mucho flow y puso a cantar a más de uno. Para que finalmente unas horas después salieran los artistas más esperados de la noche.
Toda la presentación de ambos estuvo a la altura, los efectos especiales, el sonido y la escenografía estuvieron a tope, tal como lo merecen estos reconocidos artistas.
Al momento de finalizar el concierto no se presentó tanto problema para desalojar el recinto, a pesar de que había muchas personas, no se generó mayor dificultad para abandonar la terraza.
Lo malo
Y como no todo puede ser perfecto, este concierto estuvo protagonizado por la desorganización y un poco la falta de respeto hacia los asistentes. Las entradas marcaban hora de inicio del show a las 7 de la noche, aunque muchos estimaban que empezaría a eso de las 7:30 pm nunca imaginaron que todo se saldría de control.
Inicialmente el público iba a poder disfrutar de cuatro teloneros que se presentarían, sin embargo, a última hora se conoció que sólo Carmen De León se subiría a la tarima, siendo que por las instalaciones de la terraza del CCCT se vio al equipo de uno de los teloneros que no se presentó.
Por otro lado, los animadores fueron algo “fantasmas”, pues tampoco es que animaron mucho la cosa. Tal parece que sólo fueron contratados para decir cuatro cosas de los artistas y enfocarse en los premios entregados por una empresa patrocinante del evento, de resto, más nunca se vieron, lo más lógico es que se inventaran algo en el largo lapso de tiempo que tuvo que esperar el público.
Entre la presentación de la telonera y la de los colombianos pasó un estimado de hora y media, saliendo a cantar casi a las 11 de la noche, es decir, unas 4 horas después del supuesto inicio. La lluvia se hizo presente y ni así buscaron la manera de acelerar el proceso para que comenzara el show sabiendo que había muchos niños en el lugar.
Aunque había música para “entretener” al público, el silencio se hacía grande gracias a la ausencia de alguien de la producción que informara por qué el retraso o en su defecto, los “animadores” hicieran acto de presencia para al menos conversar un poco con el público.
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