La edición 2025 del Juego de Estrellas de las Grandes Ligas pasará con honores a la historia de este siempre entretenido evento. Luego de tener una ventaja de 6-0 que lucía sumamente sólida, la Liga Nacional fue tomada por sorpresa, y en un arranque ofensivo sobre el final del juego, la Liga Americana igualó las acciones para generar lo nunca antes visto: un desempate vía "Home Run Derby".
NOTAS RELACIONADAS
Con la pizarra igualada a seis, los managers Aaron Boone (Liga Americana) y Dave Roberts (Liga Nacional) escogieron a tres bateadores cada uno, los cuales tendrían tres swings al bate para intentar buscar la mayor cantidad de vuelacercas. Al final, el equipo con más cuadrangulares combinados sería el ganador, y fue ahí donde surgió una figura importante: Kyle Schwarber.
Con la Liga Americana arriba 3-1 en el desempate luego de una ronda y media, Kyle Schwarber montó un show tremendo, al conectar jonrones con cada uno de sus tres swings, dándole la ventaja y, posteriormente, el triunfo a los suyos. Con esto, "Schwarbomb" no solo le dio el triunfo al Viejo Circuito, sino que además logró una hazaña que más nadie había logrado en un Juego de Estrellas.
Kyle Schwarber, un MVP atípico
Como bien refleja OptaStats por medio de su cuenta de X (Twitter), Kyle Schwarber se convirtió en el primer bateador en toda la historia del beisbol en ser elegido como Jugador Más Valioso del All Star de las Grandes Ligas sin tan siquiera haber conectado un imparable en el propio compromiso, algo sin precedentes.
En efecto, en lo que fue el compromiso como tal, el poderoso slugger de los Phillies de Filadelfia se fue de 2-0, con solo un boleto negociado. Su elección como MVP no tiene precedente, pero tampoco levanta polémica, ya que sus tres vuelacercas en el novedoso "tiebreaker" le dieron la victoria a su equipo.
