La temporada 2009-2010 se cuenta entre las de mayor éxito en la robusta historia de Leones del Caracas; ese fue uno de los años donde los melenudos dominaron de punta a punta en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP).
Aunque la hegemonía de ese torneo radicó en el binomio conformado junto a su enemigo irreconciliable, Navegantes del Magallanes, igualmente debe ser parte de esta narrativa.
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Dirigidos por Dave Hudgens, los caraquistas ese año compartieron la punta de la eliminatoria con los azules, ambos quedaron con marca de 41-22 (.651); para efectos de escoger refuerzos, sustitutos y armar el calendario del Round Robin, a los de Valencia correspondió el primero por llevarse 6-3 la serie particular.
En esa postemporada, Caracas continuó con su buen ritmo, dejando balance de 10-6 (.625) para ocupar el segundo puesto, llegando por segundo año seguido a la final, instancia donde enfrentaban por tercera ocasión al Magallanes.
Aunque las cosas para nada comenzaron bien en el evento decisivo, tras perder los dos primeros en Valencia, en el Estadio Universitario les fue mejor, llevándose el tercer compromiso y el cuarto, uno de los más memorables jamás vistos en las Finales de la LVBP.
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En ese duelo, los Leones nunca tuvieron el control de la pizarra; dos veces estaban abajo por diferencia de 5 carreras (5x0 y 7x2) pero a cuenta gotas descontaron, para llegar al noveno a solo 1 de los Navegantes.
Las cosas pintaban muy feo, pues en ese tramo les tocó enfrentar al mejor cerrador de las Grandes Ligas, Francisco Rodríguez, quien sin dificultad retiró los 2 primeros outs, pero todo se desbordó de manera inesperada ante Gregor Blanco.
En una inusual confrontación entre jugadores refuerzos, tomados los dos de Tiburones de La Guaira, el refuerzo de los capitalinos, que ese año apenas se fue para la calle 1 vez en 47 juegos de la eliminatoria, dejó atónitos a todos al jonronear contra el "Kid".
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La conexión fue tan sólida, que en cualquier parque desembocaba de cuadrangular; ese tablazo fue el punto de inflexión para el Caracas en esa Gran Final. Obligó a jugar entradas adicionales, donde los de casa dejaron en el terreno para igualar las cosas y obligar el retorno al puerto magallanero.
En ese escenario, muchas cosas lucían a favor de la nave, que ganó el quinto partido y llegó con ventaja de 3-2, diluida por los batazos tempraneros y oportunos de la visita, que triunfó 6x3 en el sexto y 7x2 en el séptimo.
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Para ese decisivo, de nuevo el inusitado poder de Blanco se hizo presente, mandándola por encima de la pared del bosque central como el primer bateador de la noche, apuntalando un rally de 4 anotaciones que temprano indicaron el camino hacia la vigésima coronación del Caracas BBC.
Esa es su última conquista campeonil; desde entonces han transcurrido 12 años sin poder ver de nuevo a Linda, donde de paso, solamente en 1 oportunidad han llegado a la final, desempeño sin precedente en la historia de esta franquicia, tiempo que para ellos y su afición adquiere un matiz primordialmente gris.
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Para la 2022/2023 mucho entusiasmo hay para de nuevo ser campeones, el camino no es fácil, pero el beisbol es absolutamente impredecible. ¿Veremos este año el título 21 del Caracas, la franquicia más ganadora en el deporte venezolano?