Donovan Mitchell, una de las figuras más destacadas de la NBA, dejó en claro que su pasión por el baloncesto no tiene límites. Tras una actuación memorable en el encuentro de anoche entre los Cleveland Cavaliers e Indiana Pacers, el jugador confesó en una rueda de prensa que no ha podido dormir debido a la emoción y la adrenalina de lo vivido en la cancha.
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Además, reveló que no solo permaneció despierto, sino que también vio el partido dos veces para analizarlo y revivir cada momento.“Todavía no he dormido. Anoche, después del partido, lo vi dos veces. Simplemente no podía dejar de pensar en cada jugada, cada pase y cada decisión que tomé en la cancha”, expresó Mitchell con una mezcla de cansancio y lamento.
Un partido para el recuerdo
El enfrentamiento de anoche fue uno de esos partidos que quedarán grabados en la memoria de los aficionados al baloncesto. Mitchell, conocido por su apodo "Spida" y su capacidad para liderar a su equipo en los momentos más críticos, tuvo un desempeño excepcional que mantuvo a los fanáticos al borde de sus asientos.
Aunque no especificó cuáles fueron los momentos que más lo impactaron, fuentes cercanas al jugador aseguran que su obsesión por el análisis detallado del juego no es algo nuevo. Mitchell es conocido por su ética de trabajo y su constante deseo de mejorar, lo que lo ha llevado a ser considerado uno de los jugadores más completos y competitivos de la liga. Pero la eliminación ante los Pacers parece ser un escenario que lo ha atormentado.
El impacto en el equipo
El compromiso de Mitchell no solo beneficia su desempeño individual, sino que también tiene un impacto positivo en su equipo. Según declaraciones de sus compañeros, su actitud es contagiosa y motiva a todos a esforzarse más. Es por ello que el equipo ahora deberá pensar en cómo mantener a esta plantilla para evitar salidas que puedan perjudicar el proyecto a futuro del equipo.