Es de conocimiento público que algunos de los yacimientos de litio más grandes del mundo se encuentran en Chile y en Bolivia. Sin embargo, recientemente se ha hecho un nuevo hallazgo muy lejos de estas regiones andinas, que debido a sus impresionantes dimensiones, se ha consagrado como el yacimiento más grande conocido de este mineral.
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El litio es un mineral clave en el desarrollo tecnológico en medio de un mundo donde se fabrican cada vez más dispositivos electrónicos, que necesitan del litio para su fabricación y funcionamiento. Baterías para carros eléctricos y para laptops es parte de lo que se puede fabricar a partir del litio.
¿Dónde se descubrió este nuevo yacimiento?
El descubrimiento ocurrió en la Caldera McDermitt, un supervolcán que se encuentra en la frontera entre Nevada y Oregon en Estados Unidos. Con este descubrimiento fascinante, la nación norteamericana se posiciona como un actor estratégico en la extracción de litio como un material clave en el desarrollo energético de la humanidad.
Otro de los usos imprescindibles del litio es la puesta en marcha de energías limpias, por lo cual la extracción de litio de este yacimiento ya se considera como una operación eficiente y rentable en materia de desarrollo de nuevas tecnologías. Pese a todos los beneficios, ahora se presenta el desafío de lograr una extracción con bajo impacto ambiental.
La importancia de la Caldera McDermitt
El depósito de litio que se encontró en la Caldera podría tener entre 20 y 40 millones de toneladas de este mineral, lo cual lo convierte en el mayor reservorio de litio del mundo, incluso por encima del yacimiento de Bolivia que cuenta con 23 millones de toneladas de litio. Una de las ventajas de este hallazgo es que podría estabilizar el mercado del litio al aumentar la oferta.
Según los expertos, una de las ventajas de este yacimiento de litio es que su composición geológica facilita su extracción si se compara con otros yacimientos de este mineral. En el caso de este yacimiento, la separación del litio de la arcilla es un proceso más directo que puede reducir considerablemente los costos de producción y acelerar su extracción.