Los ratones son mucho más pequeños que las ratas, pero aún así causan muchos daños. Destruyen la comida, libros, muebles y hasta los electrodomésticos con sus mordisqueos. Peor aún, el hecho de tener estos roedores en casa se ha asociado a una serie de enfermedades del ser humano, tales como el asma.
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Debido a su tamaño pequeño, caben en ranuras de hasta un quarto de pulgada (menos de un centimetro) de ancho, lo cual dificulta su control. Además, tienen una gran capacidad de multiplicación: una hembra puede tener al año hasta 10 camadas y en cada camada, tener unas 10 crías.
¿Cómo se controla a los ratones?
Para deshacerse de los ratones en su casa, siga estos tres pasos básicos:
Una Higiene Adecuada:
Si la casa está limpia y ordenada es más difícil que los ratones encuentren comida o un lugar para hacer sus nidos. De hecho, los ratones pueden vivir de las migajas, por lo que es importante guardar la comida y la basura en recipientes adecuados.
Mantenga su casa a prueba de ratones:
¡No permita que los ratones entren! Selle todas las entradas como las ranuras y los espacios alrededor de los conductos de ventilación, el alambrado y las tuberías; con láminas de metal o concreto.
Elimine a los ratones:
¡Líbrese de los ratones que ya están en su casa! Las trampas son efectivas y por lo general son más seguras que el uso de veneno. Además, los roedores envenenados, a menudo mueren en sitios que son muy difíciles de alcanzar, causando un olor muy desagradable.
Cuando recoja un ratón muerto o sus excrementos:
- Use guantes de hule.
- Prepare un desinfectante mezclando detergente y una taza y media de cloro por cada galón de agua.
- Use una botella rociadora con desinfectante para rociar completamente los roedores muertos, las trampas, los excrementos y las áreas donde encontró todo esto.
- No barra ni aspire los excrementos hasta que haya rociado el área con detergente, cloro y agua. Si barre o aspira el excremento seco, los virus contenidos en el polvo se quedarán en el aire.
- Ponga los roedores muertos y/o los excrementos en una bolsa de plástico y séllela. Después, ponga esta bolsa dentro de otra, séllela, y tírela a la basura.
Exterminadores de roedores:
Los gatos son los mejores aliados para acabar con los ratones. Si tienes uno en casa, seguro que acabas rápido con el problema. Si no tienes gatos en casa, piensa en la idea de pedir prestado un gato a un familiar o a un amigo durante unos días.
El efecto del gato sobre los ratones es doble: no solo son su comida, sino que los roedores huyen siempre cuando huelen orina del pequeño felino. Así que pon una cubeta con arena y cuando el gato haya hecho sus necesidades allí, pon el recipiente en alguna de las entradas de la casa: te aseguras que por allí no entrarán más ratones.
Trampas diferentes
Los expertos han comprobado que los ratones son animales muy inteligentes y se habitúan rápidamente a vivir, por ejemplo, con las trampas que les podamos poner los humanos. Por eso te recomendamos que no uses siempre el mismo método para eliminarlos de tu casa sino que debes combinarlos.