La FIFA ha dado a conocer el once ideal del Mundial de Clubes 2025, un equipo que refleja la calidad, la intensidad y el talento de los jugadores que destacaron en una edición llena de emoción y resultados sorprendentes. Este once, formado por las figuras más destacadas del torneo, muestra la presencia de jugadores de renombre y jóvenes promesas que dejaron huella en sus respectivos equipos.
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XI ideal del Mundial de Clubes
En la portería, el elegido es Yassine Bounou, el arquero marroquí del Al-Hilal. El exsevillista completó actuaciones de gran nivel, en especial su desempeño en los octavos de final ante el Manchester City, donde realizó hasta diez paradas decisivas que demostraron su categoría y heroísmo bajo los palos.
La línea defensiva la integran dos capitanes y amigos, Thiago Silva (Fluminense) y Marquinhos (PSG). Ambos, jugadores internacionales y con una relación de larga data, mostraron liderazgo y solidez en cada partidos.
A sus lados, aparecen Achraf Hakimi, del PSG, como lateral derecho, destacando por su aportación tanto en ataque como en defensa, y Marc Cucurella, del Chelsea, uno de los mejores laterales izquierdos del mundo en la actualidad, que fue clave en acciones defensivas y ofensivas, incluyendo una jugada memorable que evitó el 0-1 de Palmer.
En el centro del campo, destacan cuatro figuras que dominaron el mediocampo del torneo. Enzo Fernández, con un torneo de liderazgo y jerarquía, fue una pieza clave en el dominio del Chelsea. Vitinha, del PSG, es otro que integra el sector medular, mostrando su gran nivel y control del juego.
Junto a ellos y posicionados por las bandas, Cole Palmer y Pedro Neto complementaron un mediocampo dinámico y ofensivo, siendo Palmer la gran revelación del torneo, con dos goles y una asistencia, además de ser nombrado MVP de la final.
Por último, en ataque, aparecen el colombiano Jhon Arias de Fluminense y Gonzalo García del Real Madrid. Este último, máximo goleador del torneo con cuatro goles, dio el salto de la Primera Federación a la élite mundial en solo unas semanas, destacándose por su olfato goleador y su instinto en punta. Su sorprendente rendimiento le valió un lugar merecido en el once ideal.