A sus cuarenta y un años de edad, el delantero sueco Zlatan Ibrahimovic anunció su retiro como futbolista profesional y se despidió, entre lágrimas, de los hinchas del Milan, su último club, en el Estadio San Siro.
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El que fuera capitán de la selección de Suecia tuvo una fuerte conexión con el cuadro rossonero a lo largo de su carrera al tener dos etapas que suman un total de cinco temporadas y media.
Después de colgar sus botines, la dirigencia de la institución lombarda tuvo un encuentro con el exfutbolista eslavo con la finalidad de traerlo de vuelta, pero, en esta ocasión, como directivo del equipo.
Ibrahimovic mantuvo conversaciones con Gerry Cardinale, actual propietario del grupo RedBird Capital y, por consiguiente, dueño del Milan. Si bien salió sonriente de la reunión, no quiso dar declaraciones a los medios de comunicación.
Zlatan Ibrahimovic llegó al Milan en la temporada 2010/2011 y tendría una etapa de dos años en la que facturaría 56 goles y 24 asistencias en 86 partidos. Posteriormente, se iría al Paris Saint-Germain y no volvería a Milán hasta el año 2020, donde sería clave para el resurgir europeo del Diavolo.
Desafortunadamente, las lesiones evitaron que pudiera tener regularidad con el rossonero, por lo que, en tres temporadas y media, disputó setenta y ocho encuentros en los que hizo treinta y siete goles y once asistencias.