GIAN PAOLO FIORE
Con dos grupos de trabajo, uno en la ciudad de Madrid -que se empezó a reunir el sábado- y otro en Caracas, la Vinotinto realizó el lunes al completo su primer módulo de preparación para los compromisos que afrontará en el mes de marzo ante sus similares de Argentina y Colombia.
El técnico César Farías hizo esta planificación para aprovechar la fecha FIFA que se disputará mañana y en la que Venezuela no verá acción por no encontrar los rivales de la jerarquía que solicitaba el estratega nacional.
Esta dinámica no es nueva dentro del seno del combinado nacional, ya que en repetidas ocasiones Farías la ha aplicado obteniendo buenos resultados. El primer registro data de 2009, cuando Venezuela le ganó a Bolivia en La Paz con una convocatoria alternativa y pocos días después pactó 2-2 con Uruguay en el CTE Cachamay de la ciudad de Puerto Ordaz.
El segundo, más reciente, fue precisamente contra Argentina, equipo al que derrotó por la mínima en Puerto La Cruz luego de haber caído derrotado por 0-2 ante Ecuador en Quito, partido que marcó el debut de la Vinotinto en las actuales eliminatorias suramericanas.
Los siete puntos cosechados de 12 posibles certifican que este tipo de planificación ha sido exitosa. Sin embargo, la necesidad que presenta Venezuela de sumar en la tabla no permite errores en esta doble fecha de eliminatorias, que puede ser vital para las aspiraciones de la selección nacional.
Prueba de riesgo
Farías parece estar consciente de esto y del desgaste que provocarán los viajes hacia la capital argentina por lo que no debe ser sorpresa si decide descansar al grueso de legionarios con la intención de tenerlos en perfectas condiciones para enfrentarse a Colombia, uno de los rivales directos que presenta la Vinotinto en su carrera hacia la cita mundialista.
Pero de inclinarse por trasladarse a Buenos Aires con sus mejores hombres, el cuerpo técnico criollo deberá luchar contra la fatiga y además correrá el riesgo de perder a jugadores como Salomón Rondón, Fernando Amorebieta, Grenddy Perozo o Rolf Feltscher, quienes de recibir una tarjeta amarilla se perderán el choque contra los colombianos.
A este aspecto se le debe sumar la condición en la que llegará Colombia al duelo, plantel que no realizará tanto desgaste en viajes y se encontrará en Puerto Ordaz con un clima similar al de Barranquilla, ciudad que albergará días antes su compromiso con Bolivia.
Todos estos panoramas los maneja el cuerpo técnico de la selección nacional, quienes hasta el próximo jueves trabajarán de forma coordinada para terminar de definir la estrategia que aplicarán en la próxima gira.