La final del Mundial de Clubes entre Fluminense y Manchester City, disputada el pasado 22 de diciembre en Jeddah, Arabia Saudí, finalizó con un resultado de 4-0 a favor de los ingleses. Sin embargo, el partido también estuvo marcado por una tangana que se originó tras el pitido final, protagonizada por el defensor brasileño del Fluminense, Felipe Melo y el atacante ingles del City, Jack Grealish.
NOTAS RELACIONADAS
Según Felipe Melo, el jugador del Manchester City se burló del Fluminense durante el partido al gritar "olé". El brasileño, de 40 años, es conocido por su carácter temperamental y no dudó en encararse con Grealish tras el encuentro.
Por su parte, Grealish ha negado las acusaciones de Melo. El inglés ha asegurado que no gritó "olé" en ningún momento y que, de hecho, se mostró respetuoso con el Fluminense durante todo el partido. Sobre estas acusaciones, el internacional con los tres leones emitió un mensaje en redes sociales, negando las acciones que le imputan y que desde medios brasileños, aseguran que insultó a sus colegas de profesión.
La tangana entre ambos jugadores fue rápidamente apaciguada por sus compañeros y miembros del cuerpo técnico. Sin embargo, el incidente ha generado polémica en las redes sociales, donde muchos aficionados han mostrado su apoyo a Melo y otros han criticado el comportamiento de Grealish.
¿Qué sucedió realmente?
Es difícil saber con certeza qué sucedió realmente entre Felipe Melo y Jack Grealish. Las acusaciones del brasileño son graves, pero Grealish las ha negado de forma contundente.
Es posible que la tangana se produjera por un malentendido. Melo podría haber interpretado mal un gesto o una palabra de Grealish y reaccionar de forma exagerada, además la calentura por el mal resultado donde el Flu s vio ampliamente superado por el conjunto ciudadano pudo generar la confusión. También es posible que Grealish realmente se burlara del Fluminense, pero que lo hiciera de forma sutil y que Melo haya exagerado su reacción.
En cualquier caso, la tangana es un episodio negativo que empaña la imagen de un partido que, en el terreno de juego, fue un claro triunfo del Manchester City.
Es posible que la tangana tenga consecuencias disciplinarias para alguno de los dos jugadores. La FIFA podría abrir un expediente sancionador para investigar lo sucedido. Si la FIFA considera que Grealish se burló del Fluminense, podría ser sancionado con una multa o una suspensión. Por otra parte, si se demuestra que las acusaciones de Melo son falsas, podría ser el brasileño el que reciba una sanción. Sin embargo, es posible que e incidente solo quede en eso y ambos jugadores solo sean reprendidos con un amonestación verbal por parte de sus directivas.