Redacción Meridiano
Un cabezazo de Chris Smalling a cinco minutos del final dio la victoria en Wembley a Inglaterra, que se impuso a la selección de Portugal, desprovista de la aportación de Cristiano Ronaldo y que jugó durante una hora con un hombre menos por la expulsión de Bruno Alves.
La victoria acentúa el asentamiento entre los favoritos en Francia 2016 a Inglaterra, que pretende rentabilizar un plantel plagado de talento y jugadores de renombre, reafirmado con los resultados obtenidos en el último año.
Roy Hodgson puso en escena un planteamiento atrevido. Con una tripleta ofensiva digna de tener en cuenta. A la imaginación de Wayne Rooney unió a dos de los mejores anotadores de la Premier. El ariete del Tottenham Harry Kane y el goleador del campeón, el Leicester, Jamie Vardy./Con información de EFE
2016-06-02