La batalla legal entre Daddy Yankee y su exmujer Mireddys González, acompañada por su hermana Ayeicha, escaló este 30 de julio de 2025 a un nuevo nivel tras la presentación de dos recursos legales en el Tribunal Federal de Estados Unidos.
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El artista exige 12 millones de dólares por daños y pérdidas, en una demanda que acusa de sabotaje corporativo y traición interna que compromete sus compañías El Cartel Records y Los Cangris Inc.
Daddy Yankee desata nueva polémica legal
La primera acción legal es una demanda de 27 páginas en la que se denuncia una campaña deliberada para destruir registros esenciales dentro de la estructura operativa.
Esto ocurrió justo en el momento en que Mireddys y su hermana perdían el control formal de las empresas tras transferir $100 millones sin autorización.
Además, se detallan acciones como la eliminación de correos electrónicos corporativos vinculados con la venta del catálogo musical del boricua y la planificación de su gira de despedida La Última Vuelta World Tour.
Paralelamente, el reggaetonero presentó un segundo recurso tipo injunction, que busca medidas cautelares urgentes y responsabilización por violaciones a la Ley de Fraude y Abuso Informático (CFAA) y la Ley de Comunicaciones Almacenadas (SCA).
Según la demanda, las hermanas borraron evidencia clave almacenada en cuentas de correo protegidas, lo que ha dejado a las empresas sin acceso a documentación operativa y financiera crítica.
El análisis forense confirma que dichas eliminaciones ocurrieron en el contexto de disputas previas registradas en los tribunales estatales, lo que ha agravado la situación y dificulta la transición ordenada de activos.
Por esto, el intérprete de “Pose” exige no solo la restitución de datos y documentos sino también compensaciones monetarias ligadas a la destrucción deliberada de información corporativa.
Encontronazos tras la separación
Este nuevo episodio se suma a litigios previos presentados en tribunales estatales desde diciembre de 2024, cuando el cantante acusó a la empresaria y madre de sus hijos de retiros financieros no autorizados por un total de $100 millones desde las cuentas de sus empresas.
Mientras la disputa judicial se intensifica, Ramón Ayala, su nombre real, continúa defendiendo que su fe religiosa le ha brindado consuelo emocional frente a esta traición personal y profesional.
A su vez, su exesposa respondió por medio de una contrademanda solicitando sanciones contra el artista por presunto desacato civil y falta de entrega de reportes financieros mensuales exigidos por órdenes judiciales.