Durante este sábado se dio a conocer la lamentable noticia del fallecimiento de Bobby Jenks, lanzador que se mantuvo activo en las Grandes Ligas por siete temporadas. Para muchos también es recordado como el cerrador de las Medias Blancas de Chicago en la era de Oswaldo Guillén como manager.
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La causa de su partida se debió a un cáncer estomacal, el cual estaba tratándose en una clínica en Sintra, Portugal. Jenks contaba con 44 años y ya tenía bastante tiempo cumpliendo el tratamiento necesario para mantenerse con vida, pero la última sesión fue demasiado fuerte.
Guillén se despide de su cerrador estrella
Oswaldo Guillén siempre se ha caracterizado por ser un manager muy influyente y querido por sus peloteros. En su época con las Medias Blancas, algunos fanáticos todavía recuerdan la manera tan particular que tenía para llamar al montículo a Bobby Jenks, con gestos exagerados por su gran corpulencia.
Luego de la triste noticia, el estratega venezolano publicó unas emotivas palabras en su cuenta de Instagram, recordando a quien también era su amigo fuera de los terrenos de juego.
"Me entristece oír sobre Bobby. Estoy sin palabras para describir lo que siento. Perder a un jugador, y más importante a un amigo, nunca es fácil. Un gran competidor sin miedo, solo con poder y un gran corazón. El cielo tiene a un gran cerrador y a un gran hombre. Descansa en paz, Bobby", escribió Ozzie.