Las inundaciones catastróficas que azotaron Texas desde la madrugada del 4 de julio han dejado un saldo trágico de más de 130 vidas perdidas y más de 160 personas desaparecidas. Las autoridades continúan con las operaciones de rescate en las zonas más afectadas, donde la situación sigue siendo crítica.
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Operaciones de rescate en curso
El condado de Kerr se ha convertido en el epicentro de las labores de búsqueda y rescate. Equipos de emergencia trabajan incansablemente durante toda la noche para recuperar a las víctimas y asistir a aquellos que aún se encuentran atrapados o en peligro. A pesar de los esfuerzos, las condiciones meteorológicas adversas complican las operaciones, y las autoridades han emitido alertas sobre la posibilidad de lluvias intensas que podrían agravar la crisis.
Una alerta de inundación sigue vigente hasta al menos el lunes por la noche para Texas Hill Country, incluyendo ciudades como Kerrville. Se pronostican lluvias intensas durante la tarde y noche del lunes, con acumulaciones que podrían oscilar entre 1 y 2 pulgadas. Algunas tormentas aisladas podrían generar hasta 5 pulgadas adicionales. Aunque se esperan lluvias menores el martes y lloviznas el miércoles, se anticipa un periodo prolongado de cielos despejados a partir del jueves.
Comentarios del presidente Trump
En medio de esta crisis, el presidente Donald Trump hizo declaraciones sobre la situación en Texas, sugiriendo que "deberían haber tenido campanas" para alertar a la población sobre las inundaciones. En una entrevista con Fox News, Trump afirmó que, a pesar de las advertencias, muchas personas estaban durmiendo y no pudieron prepararse adecuadamente para el desastre. Su comentario ha generado controversia y debate sobre la preparación ante emergencias en la región.
Organizaciones locales y ciudadanos están trabajando juntos para proporcionar asistencia a quienes han perdido sus hogares y seres queridos en este devastador evento natural. La solidaridad y el apoyo mutuo son fundamentales en estos momentos difíciles.