Para Osmer Morales nada sencillas fueron las ediciones anteriores de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional (LVBP); para él fue duro lapso de tiempo donde cosechó infructuosos promedio de carreras limpias permitidas, 6.27 y 6.67, muy divergentes de las tres cosechadas inmediatamente antes, 3.24, 2.95 y 3.06.
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Pero el lanzador derecho de Bravos de Margarita este año se ha mostrado realmente revitalizado en la primera parte del torneo 2023/2024; en ese trayecto fue el oasis del pitcheo en general de los insulares que en líneas generales fue deficiente.
Desde sus funciones como brazo abridor el nativo de Villa de Cura se quedó con la mejor efectividad entre los iniciadores del mánager José Moreno, 2.05 que previo a la jornada de este jueves lo ubicó 4to entre sus colegas del circuito, además, bastante superior a la cifra media del cónclave, 4.97, es decir, 58.8% mejor.
Asimismo el dorsal 73 dejó 1.41 de whip, ligeramente alto pero que igual le sirvió para ser 9no en la LVBP y del mismo modo por encima de la media del circuito, 1.54, un 8.4% más óptimo.
¡Hey! Pero las cosas no se detuvieron ahí para Osmer Eduardo, que de paso apuntaló el renglón de toleteros guillotinados con 25 en 26.1 episodios laborados, lo que dejó en 8.6 su promedio de ponches por cada 9 tramos. En ese trayecto también concedió 25 imparables para promediar 8.6, un punto en el que quedó con saldo negativo, pero que en parte se resarció con los 12 boletos otorgados para 4.1 en promedio.
Otros de los aspectos importantes de Morales radicó en su durabilidad en el morrito; durante 3 de sus 6 aperturas lanzó cuando menos 5 innings, esa ha sido una cualidad atípica, un activo muy buscado y deseado para los iniciadores en un circuito como este. Y para nada se nos olvidó que el as de los Bravos es líder de la Liga en victorias con 3.
